Mujeres que han hecho historia

Mujeres que han hecho historia

El 27 de febrero de 1844 se materializaron los trabajos preparatorios de un grupo de hombres y mujeres para dar fin a lo iniciado en el año 1822. Al decir el maestro Roberto Cassá en su libro “Antes y Después del 27 de febrero”, lo ocurrido en 1844 está sumido en penumbras y confusiones. En el devenir de las múltiples narrativas de los historiadores dominicanos, es importante resaltar hechos y actores que participaron pero que no aparecen en las listas oficiales, cuyas actuaciones aportaron para lograr la proclamación de la separación de Haití y la autodeterminación nacional para la formación del nobel Estado dominicano.

Muchas mujeres contribuyeron al proceso independentista y no aparecen con el protagonismo que se merecen. Hay que escarbar en la historia para identificarlas, las que colaboraron en la gran gesta libertaria. Se destacan muchas como doña Chepita, Rosa Duarte, María Baltasar de los Reyes, María Concepción Bona, Ana Valverde, María Trinidad Sánchez, entre otras. Ellas no aparecen en las listas oficiales, pero sí estuvieron presentes y hoy son las ausentes en la historia.

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Una de las primeras mujeres que conoció los planes separatistas fue la poca conocida doña Chepita, cuyo nombre es Josefa Antonia Pérez de la Paz, a la cual se le asocia a su hijo Juan Isidro Jiménez. Sin embargo, facilitó su casa para las reuniones del movimiento y posterior fundación de la sociedad secreta La Trinitaria, colaborando con la primera organización que conoce la historia política dominicana.

Otra que no ha sido valorada en su justa dimensión es Rosa Duarte, quien preparó y cargó parte de las municiones con otras mujeres; participó activamente en las organizaciones La Trinitaria y La Filantrópica. Es autora de la obra titulada “Apuntes para la Historia de la Isla de Santo Domingo” y del “Diario de Rosa Duarte” valorada como una de las fuentes documentales sobre la vida y accionar político de Juan Pablo Duarte y Diez.

Se destaca María Baltasara de los Reyes y Bustamante, como una de las que tomó las armas y estuvo presente en el Fuerte de Angulo haciendo guardia aquella noche del trabucazo. Fue miembro de la sociedad secreta La Trinitaria realizando encomiendas como la riesgosa tarea de ocultar a Juan Pablo Duarte cuando era perseguido por el ejército haitiano.

María de la Concepción Bona y Hernández, participa en las reuniones conspiradoras, de las cuales se le asigna la tarea junto a su prima María de Jesús Pina y Benítez, Isabel Sosa y María Trinidad Sánchez, de confeccionar la primera bandera que ondeó en el Baluarte del Conde, la noche del 27 de febrero.

Una militante de la independencia fue Ana Valverde Fernández, quién fabricó junto a otras mujeres las balas y cartuchos que fueron utilizadas en la lucha por la independencia. Se esforzó por recaudar fondos para financiar las actividades separatistas. Pago un precio muy alto, ya que fue deportada junto a su familia por su participación en la gesta de la independencia.

La primera víctima de lo que se puede tipificar como un crimen político fue María Trinidad Sánchez. Participó en las reuniones clandestinas para bordar la bandera nacional, alojó en su casa a los perseguidos, participó en las luchas para lograr una amnistía para los encarcelados y expulsados por Pedro Santana. Fue acusada de conspiración contra el gobierno y de ayudar a los patriotas llevándoles proyectiles y cartas. Fue hecha prisionera y llevada la Torre del Homenaje; en uno de sus interrogatorios se le prometió perdonarle la vida si delataba a los vinculados a la conspiración. El 27 de febrero de 1845, justo un año después de la independencia, fue fusilada porque no traicionó a sus compañeros del movimiento trinitario.

En los actos conmemorativos de nuestros 180 años de la independencia, son grandes ausentes, las que participaron en la lucha por la libertad y que fueron perseguidas, deportadas y fusiladas. A pocos días de conmemorarse el Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, a ellas hay que reconocerles su participación y su entrega. ¡Que vivan las mujeres de la independencia nacional!

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