POR ODALIS MEJIA
Por lo menos un 40% de las medicamentos falsificados que entran al país provienen de Colombia y Venezuela, reveló ayer el director de Investigaciones y Falsificaciones de la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos (ARAPF), Claudio Almonte, quien aseguró que este negocio ilícito mueve cerca de RD$30 millones de pesos al mes.

Almonte afirmó que el tráfico de medicamentos es realizado regularmente por mujeres dominicanas y haitianas que son utilizadas como «mulas» para traer los productos al granel  que luego son empaquetados en el país en envases también falsificados.

Informó que la magnitud del negocio fraudulento es tal que ha habido casos en que han sido decomisados  paquetes con mercancía con valor de hasta RD$5 millones.

Dijo que las falsificaciones afectan los productos líderes de los principales laboratorios internacionales. Dijo que otros países de Centro y Suramérica son utilizados como punto de trasiego de medicinas al país, que llegan  por lo regular en vuelos nocturnos.

Mientras que Pedro Féliz Montes de Oca, procurador adjunto para el derecho de propiedad intelectual, consideró como preocupante la introducción al país de medicamentos falsificados, ya que se trata de asunto de salud pública.

Almonte  y Montes de Oca se refirieron al tema al participar en un  taller dirigido a fiscales del Distrito Nacional y algunas provincias del interior,  a quienes se instruyó sobre las diversas formas del delito de falsificar medicinas a fin de iniciar acciones tendentes a controlar esa práctica.

Montes de Oca señaló que el Ministerio Pública encaminará acciones penales en contra los falsificadores y los comerciantes que vendan productos adulterados sin tener que esperar la denuncia privada porque se trata de asunto  criminal que afecta a gran parte de la población.

Informó que en lo que va de año se han producido sólo 19 operativos en contra de los negocios que incurren en la práctica, los cuales consideró muy poco, por lo que prevé que luego de la capacitación se incrementen considerablemente. En el año 2005 se realizaron 55 acciones.

Apuntó que ante la magnitud y forma de este tráfico, el Ministerio Público trabaja de la mano con los fabricantes y representantes de laboratorios para conocer todos los detalles y poder intervenir efectivamente.

Afirmó que el Ministerio Público  ha recibido el apoyo de ARAPF para enfrentar el comercio ilícito, que en muchas ciudades del interior del país esa práctica se  realiza de forma casi pública, por lo que se  procederá a reforzar las acciones.

En el taller los fiscales recibieron entrenamiento para identificar cuando un medicamento está alterado,  informaciones sobre el movimiento de ese negocio, las sanciones legales que contempla la Ley de Salud, entre otras herramientas. También se  realizaron  ejercicios de comparación entre las particularidades de las medicinas originales y las falsificadas.