Cientos de mujeres vinculados a los transportistas reclamaron ayer frente al Palacio Nacional su inclusión en las rutas alimentadoras del Metro, que el Gobierno pondrá en funcionamiento para facilitar el acceso a ese medio.

Las féminas, agrupadas en la Federación Nacional de Mujeres Transportistas,  llegaron hasta el portón lateral de la Casa de Gobierno con pancartas en manos y elevando consignas alusivas a su reclamo.

“¡Cuando el niño pida leche, le diremos que beba metro!”,   vociferaban las mujeres choferes, cobradoras y esposas de transportistas.

En nombre del grupo  habló Marlene Féliz, quien aseguró que el director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), Diandino Peña, le prometió que serían tomadas en cuenta y luego han visto que  compraron los autobuses que realizarán el trabajo.