De los Servicios de Hoy. Bank of America ha alcanzado un acuerdo con la justicia de Estados Unidos, tanto a nivel federal como estatal, para poner punto y final a su papel en la venta de activos respaldados por hipotecas de alto riesgo que desató la crisis financiera de 2008.

La entidad desembolsará un total de 16.650 millones de dólares (unos 12.600 millones de euros) y admitirá haber engañado a los inversores sobre la calidad de sus activos así como los de Merrill Lynch y Countrywide Financial, absorbidas por el banco en el punto álgido de la crisis.

El acuerdo fue dado a conocer ayer y de la multa total, 10.000 millones de dólares serán pagado en efectivo y alrededor de 7.000 millones de dólares serán destinados a indemnizar a los clientes de la entidad financiera.

Esta cifra se postula como una de las mayores represalias impuestas por la justicia de EEUU a un banco patrio. Recordemos que el fiscal general, Eric Holder, y JP Morgan Chase, la mayor entidad bancaria del país, alcanzaron un acuerdo en noviembre del año pasado en el que el banco capitaneado por Jamie Dimon, desembolsó un total de 13.000 millones de dólares por haber engañado a sus inversores con sus activos respaldados por hipotecas.

Por su parte, Standard Chartered suma un nuevo capítulo en la saga del escarnio de los reguladores de EEUU por sus defectuosos controles contra el lavado de dinero.

Dos años después de que la entidad, anteriormente reputada por la pulcritud de sus prácticas, fuese multada con 340 millones de dólares (255 millones de euros), el propósito de enmienda no ha dado resultado y el Departamento de Servicios Financieros del Estado de NY ha redoblado sus actuaciones.