CARACAS (AFP).- Una jueza de menores de Venezuela multó al vespertino opositor “Tal Cual” con 18.604 dólares por un artículo sobre la hija del presidente Hugo Chávez, considerando que violaba los derechos de la niña de ocho años, informó ayer, martes, el diario.

El periódico dirigido por Teodoro Petkoff informó que hará una colecta pública para pagar la multa, tal como hizo Chávez quien también recogió a principio de su mandato dinero para pagar una sanción del Consejo Nacional Electoral.

“La falta que habríamos cometido sería la de haber publicado el viernes 25 de noviembre de 2005, en primera plana, el acostumbrado editorial humorístico de Laureano Márquez en el cual, de acuerdo al Consejo del Niño y de la Fiscalía, se habrían violado la intimidad, la privacidad, la integridad” de la niña, dijo el diario.

El artículo de Márquez titulado “Querida Rosines”, está escrito como si se tratara de una carta a la niña pidiendo que le diga o hable a su padre temas que demanda la oposición.

El vespertino consideró que “tal falta no existe sino que es un puro pretexto para sancionar tanto a Laureano como a Tal Cual (…) Este es un juicio de Chávez”.

El diario denunció que el juicio fue abierto luego de que Chávez dijera en una de sus alocuciones que se habían metido con su hija, recordó “Tal Cual”.

Chávez “ha obligado a unas funcionarias del Consejo del Niño a abrir ese procedimiento ridículo y grotesco, sin pies ni cabeza”, señaló el diario.

“(…) Vamos a abrir desde mañana una colecta pública (…) que sea el pueblo quien de al Emperador la respuesta que merecen su prepotencia y su abuso”, señala el editorial del vespertino, titulado “Condenados Laureano y Tal Cual”.

Chávez suele nombrar a su hija menor en sus alocuciones y en el programa semanal Alo Presidente y ha señalado que toma algunas de sus decisiones luego de reflexionar sobre comentarios que la pequeña le hace.

Por ejemplo, Chávez solicitó un cambio en el escudo argumentando que su hija le señaló que el caballo blanco del emblema marchaba en una dirección. El mandatario meditó entonces que le caballo debía apuntar hacia la izquierda.