MÚNICH, Alemania. AFP. Berlín es la reina de la moda en Alemania, como demuestra hasta el domingo su Fashion Week, pero la orgullosa y rica Múnich cultiva su diferencia, segura de sí misma y de su estilo.
Desde la moda hasta la joyería, pasando por el diseño, en Múnich el lujo es una industria, más que una tendencia. Los habitantes de Múnich tienen un poder adquisitivo de casi 22,600 euros anuales. Esto significa el 23% más que el promedio nacional y 47% más que el de los berlineses, según las estadísticas regionales de 2007.
El estilo chic estuvo durante largo tiempo asociado a Múnich, sobre todo en los años 80, cuando Berlín todavía era prisionero de la Guerra Fría y del Muro. Pero la capital de Alemania reunificada es una ciudad barata que dispone de hectáreas de talleres vacíos que atraen a artistas del mundo entero, mientras que la capital bávara sigue siendo una pequeña ciudad refinada, según explica Dorothea Beisser, directora de la escuela de estilismo de Múnich.