El juez de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas dictó prisión preventiva contra el abogado Johnny Valverde Cabrera y una garantía económica de 500 mil pesos a la abogada Amarilys Liranzo Jackson, quienes según la acusación del Ministerio Público, se dedicaban a someter demandas en daños y perjuicios contra la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur, Edesur, usando actas de defunción falsas de personas que supuestamente murieron por accidentes eléctricos.
Los togados tienen cargos de falsificación de documentos públicos y su uso, así como privados y de estafa, y según afirma la fiscal del Distrito, Yeni Berenice Reynoso, se trata de una mega estafa que ronda los 100 millones de pesos.
De los casos. Aunque la Fiscalía asegura se trata de muchos casos, por el momento en el expediente constan tres demandas que los togados habrían sometido ante la Cámara Civil por daños y perjuicios causados a personas que están vivas, pero que tampoco sufrieron ningún accidente eléctrico.
Para sustentar las demandas estos habrían usado notas informativas de la Policía, donde informaba la muerte por shock eléctrico y quemaduras eléctricas, así como actas de defunción y certificaciones de hospitales que, según la fiscalía, eran falsas.
A nombre de la familia de Julio César Minier, un limpiabotas de San Cristóbal, estos estaban solicitando una indemnización de 10 millones de pesos y aportaban la nota de la Policía que informaba las circunstancias de la muerte en junio del 2015, pero según certificación de la institución del orden, no hay en su registro ningún teniente llamado Pulinario Sosa, quien firmaba la nota.
Minier, con aparentes complicaciones de salud fue uno de los testigos llevados al tribunal.
Otra de las demandas fue actuando a nombre de José Peña Gómez, conviviente de la señora Cristobalina Betances, de Barahona, quien supuestamente murió en mayo del 2016 al hacer contacto con un cable eléctrico que estaba en la vía pública. Para sustentar esto, aportaron una nota informativa con membrete de la Policía y firmada por el segundo teniente Carlos Gómez, de la sub-dirección adjunta de investigaciones criminales.
Sin embargo, en el libro de defunciones del Hospital Jaime Mota no aparece registrado el fallecimiento de la señora Betances.
El certificado de su muerte fue expedido por el doctor Akhtar Ali Khan, sub-director del referido centro de salud.
Betances se dio cuenta que figuraba como fallecida cuando fue a utilizar su tarjeta Solidaridad, y no pudo porque aparecía como muerta por un shock eléctrico.
“Yo nunca he recibido descarga eléctrica”, manifestó la mujer.
A la abogada Liranzo Jackson se le impuso también presentación periódica e impedimento de salida.
La magistrada Reynoso indicó que la investigación sigue abierta y que no se descarta la participación de otras personas.