La delincuencia, la drogadicción y la violencia juvenil son males que permean los sectores más empobrecidos de este país.
Quizás esta variante se debe a que los niños y adolescentes de los barrios no tienen programas de estudios alternativos que incentiven sus diversas habilidades y destrezas.
Como una labor altruista y que persigue un cambio social, la Fundación Orquesta Sinfónica Juvenil, desarrollará el proyecto Orquestas sinfónicas barriales, el cual emulará el programa El sistema, fundado en Venezuela en 1975.
El proyecto social. El programa se realizará en asociación con instituciones establecidas en las localidades donde se implementará, las cuales deben tener un historial de muchos años de servicio en la comunidad, ya que servirán de sede de la escuela de música. Estas pueden ser una iglesia, una escuela o colegio, un centro cultura, entre otras entidades, explicó Felipe Auffant, miembro de la Fundación.
Además precisó que a esos locales se llevarán los instrumentos donados por algunas empresas privadas y embajadas de diferentes países.
El inicio. En el Colegio Santo Domingo Savio del sector Las Cañitas se fundó la primera Orquesta Barrial con el apadrinamiento de la Embajada de Alemania, la cual donó 42 instrumentos musicales y seguirá auspiciando la causa.
Metodología. Darwin Aquino, director de la Orquesta Sinfónica Juvenil y de este programa en particular, indicó que a través del proyecto se busca fomentar los valores de convivencia, democracia e igualdad en los niños y adolescentes que participen.
Además precisó que al momento de instalar una escuela de música en un sector se evalúa el impacto que generará en la población, en cada niño y sus familias.
Las clases se darán semanales, pero basados en la orquesta en sí misma, ningún niño se aislará a tocar un instrumento, sino que aprenderán a tocar en unión y con igualdad de oportunidades, puntualizó Aquino.
Para seleccionar los infantes que conformarán la orquesta se hacen talleres de apreciación y los que tengan más inclinación hacia la música serán elegidos para el programa.
Sin embargo, las orquestas barriales no serán excluyentes, porque a medida que vayan creciendo se llevarán más instrumentos a las localidades, o se aumentarán los talleres para que los niños puedan integrarse, resaltó el violinista.
Asimismo, Aquino precisó que no hay un límite de edad para ingresar a las bandas musicales, debido a que algunos instrumentos pueden tocarlos los más pequeños y los que requieren más fuerza física para su ejecución será para los más los grandes.
Experiencia. Para Auffant ha sido muy grato el interés que los niños han manifestado por aprender a tocar los instrumentos e integrarse a la orquesta.
Yo creo que a partir de este proyecto van a sobrar músicos en República Dominicana, pero faltarán instrumentos para seguir nuestro objetivo, añadió con cara de satisfacción Auffant, quien espera que más instituciones colaboren con esta causa.
Conciertos. El pasado 22 de marzo se realizó el primer concierto de la orquesta barrial de Las Cañitas en el Colegio Santo Domingo Savio, donde estuvo presente el embajador de Alemania, Christian Germann.
La Embajada de Japón haría una donación para la instalación de otras orquestas, pero en vista del terremoto y tsunami que afectó ese país no se ha podido. El 11 de julio la Fundación Orquesta Sinfónica Juvenil realizará un concierto en el jardín japonés del Jardín Botánico Nacional, en solidadaridad con Japón.
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Próxima escuela
El Instituto de Reformación de Menores, en la provincia de San Cristóbal, será la segunda escuela que abrirá la Fundación. Con este programa se tratará de alejar a los adolescentes y niños de los vicios y la delincuencia e incentivar en ellos a los grandes músicos clásicos que representarán al país en otras fronteras.