La tarde del jueves, la Vicepresidencia de la República que encabeza la doctora Margarita Cedeño celebró en la sala Máximo Avilés Blonda del Palacio de Bellas Artes la final de la sexta competencia de talentos “Música Urbana por los Valores”.
El tema de este año fue “Prevención del uso indebido de las drogas”. Las audiciones realizadas en distintos barrios reunieron a 60 jóvenes, y de este grupo fueron seleccionados 22, quienes concursaron en la final en las categorías de canto libre (freestyle) y canto.
La primera competencia que se desarrolló fue la de canto libre, con 12 jóvenes, entre 18 y 30 años, quienes improvisaron en vivo con algunas palabras alegóricas al tema central del concurso, las cuales se le fueron dando al momento de subir al escenario por el presentador del concurso Gnómico. Luego participaron diez jóvenes más en la categoría de canto, los cuales fueron evaluados por el jurado compuesto por diez personas.
Los ganadores en estilo libre fueron: Víctor Manuel Pérez, primer lugar; Francisco Alberto Fuente, segundo, y Yohanna Corniell Leyba, tercero. Mientras que en canto, el primer lugar lo obtuvo Félix Cruz Santana, con la canción “Di que no”. El segundo recayó en manos de Maicol Junior García, con el tema “Un chance”; mientras que el tercer premio lo recibió Diógenes Jesús Zorrilla, con “Mejores caminos”.
Los ganadores fueron premiados con RD$ 75 000, 50 000 y 25 000 pesos, correspondientes al primero, segundo y tercer lugar de cada modalidad respectivamente.
La vicemandataria Margarita Cedeño expresó que con este concurso busca aunar esfuerzos a través de la música urbana para alejar a la juventud de las drogas.
“He disfrutado muchísimo este concurso y para nosotros es un honor poder brindar esta oportunidad y ofrecer este escenario a los verdaderos protagonistas del cambio en la República Dominicana que son los jóvenes”, dijo Cedeño de Fernández.
De su lado, Altagracia Suriel, directora del programa Progresando con Solidaridad (Prosoli), dijo que esta actividad se realiza con el fin de resaltar que en los barrios también se puede educar y transmitir valores para un mejor futuro.