POR JOSELIN RODRÍGUEZ
Luego de haber realizado dos asambleas para definir el camino y la estrategia a seguir, los 68 integrantes de la Orquesta Sinfónica Nacional decidieron suspender sus labores hasta que las autoridades cumplan sus promesas de garantizarles un mejor ambiente de trabajo y de aumentarles en un 15 por ciento los salarios, teniendo en cuenta los escalafones.

Josué Santana, percusionista; Temístocles Luna, primer corno, y Slobodan Veljkovic, principal cellista y profesor del Conservatorio Nacional de Música, dijeron que los músicos ya están cansados de sólo recibir promesas que las autoridades no tienen el interés de cumplir.

Reunidos en el Conservatorio Nacional, dijeron que a pesar de que van a continuar con los ensayos, se ven en la necesidad de no participar en los conciertos programados para el día 9 en la Segunda Brigada del Ejército en Santiago y el 17 en la Plaza España, organizados por las secretarías de Cultura y Turismo.

Mientras que Dante Cucurullo, director suplente de la OSN, llamó la atención del Gobierno para que busque una solución definitiva a las necesidades, que durante muchos años ha acarreado la orquesta, ya que si los estudiantes ven que el presente es tan difícil no van a querer ser músicos en el futuro.

 Josué Santana explicó que los músicos reclaman el aumento del 15 por ciento que se les prometió desde julio pasado y que este pago se realice tomando en cuenta la división que existe entre lo que es un concertino, asistente de concertino, principal, asistente del principal y tutti.

“Los músicos ya estamos cansados de enviar comunicaciones a las autoridades en las que les planteamos la solución de estos problemas, pero no nos hacen caso. No es posible que un principal, que es la persona en la que recae la mayor responsabilidad de la orquesta, gane menos que un tutti”, indicó Santana.

En tanto que Luna dijo que los músicos han agotado todas las vías posibles para la búsqueda de una salida satisfactoria a la problemática y que decidieron convocar a la prensa, porque es el último recurso que les queda.

“Este problema no es de ahora, es de hace mucho tiempo, pero cada cuatro años lo sentimos con más fuerza. Si queremos tener jóvenes interesados en la música, decididos a estar en la orquesta, debemos hacer de nuestra profesión un trabajo digno con el que se sientan plenamente identificados y asegurados, porque son muchas las horas de práctica que este trabajo requiere”, manifestó Luna.

Asimismo, dijo que el maestro Carlo Piantini, director de la OSN, no está enterado de nada de esto, ya que hace más de dos meses que se encuentra  fuera del país.

 “Éste es otro de los grandes problemas que tenemos, que la OSN no tiene un director que salga en defensa de sus intereses”. 

 De su lado, Veljkovic explicó que además de ser músicos, también los miembros de la OSN son inversionistas, debido a que los instrumentos están a sus cargos, por lo que el mantenimiento es parte de sus responsabilidades.

“Imagínese, un instrumento de cuerdas de más de cien años necesita un cuidado especial, por lo que hay que viajar a los Estados Unidos para arreglar el desperfecto, que puede ser creado por la humedad y el calor. Es mucho el dinero que hay invertir en los instrumentos, que en ocasiones no tienen garantías”.