Hoy 
La música es la mejor tarjeta de identificación de la República Dominicana. Nuestro merengue, alegre y contagioso ha traspasado fronteras, como si quisiera regalarle al mundo la esperanza de saber que siempre hay un motivo para empezar.
Al finalizar este año 2003 y prepararnos para recibir el 2004 es oportuno vestirnos de optimismo y regocijo.
Es por ello, que En Sociedad trae en su portada y páginas centrales a una fiel representante de la alegría.
Su cálida sonrisa nos recuerda que «la vida te sonríe, que te da los buenos días, aunque llueva y se te caiga el mundo encima vive, que la vida es una sola».
Justamente lo que proclama esta canción, es lo que define a nuestra Milly Quezada, una mujer que ciertamente ha saboreado la dicha de llegar a la cima del éxito de recibir importantes reconocimientos, y sobre todo, de tener el carisma suficiente para mantenerse durante 25 años en el gusto del público.
También ella ha vivido momentos difíciles y es cuando se ha armado de valor, como si fuera un «moriviví» se ha levantado para seguir contagiando de entusiasmo, ilusión y energía nuestras vidas.
Desde muy pequeña Milly Quezada demostró su destreza por el baile y el canto. Por cinco centavos le bailaba a su padre, quien de cariño le decía «Cuquita», porque era muy juguetona.
En el baúl de sus recuerdos guarda el momento en que junto a su familia emigró a New York. «Cuando hacían velada me tocaba presentar, modelar o bailar, siempre fui muy espontánea».
Así se fue definiendo su carrera musical hasta llegar a convertirse en la reina del merengue.
De sus inicios nos relata que mientras estudiaba en la Universidad y trabajaba como secretaria ejecutiva en la Golfan Webster, los fines de semana tocaba con Mlly, Joselyn y los Vecinos.
«No fue difícil incursionar en el mundo del espectáculo, porque respondimos a una necesidad. Cuando se inició la liberación femenina en el año 1975 era necesario decir las cosas y hacer que se nos tomara en cuenta», señala.
Tras veinticinco años en el arte y con 27 discos, afirma que mantenerse durante este tiempo no se le ha hecho difícil, porque detrás de ella hay un grupo de personas que siempre le han apoyado. «Mi esposo Rafael Vásquez le dio mucha importancia a lo que vio como una oferta musical diferente dentro de la industria».
Como mujer tuvo muchas primicias de estar al frente de una agrupación, junto a su hermana Yoselyn, quienes respetan y admiran a Casandra Damirón y Elenita Santos.
La agrupación surgió como una necesidad de reunir la comunidad de dominicanos radicados en New York para mermar un poco la dificultad del idioma, del clima y la forma de vida tan distinta a la que estaban acostumbrados. «Nos reunimos los fines de semana con los muchachos del barrio. Mi mamá nos dejaba hacer bulla en el apartamento y la gente nos decía que esto era bonito porque llenamos un vacío dentro de esa gran urbe».
Los primeros cinco años de la agrupación fueron más bien un pasatiempo que luego se le puso nombre. Su primer disco fue «Esta es Milly con los vecinos», que se grabó en el año 1975 con sus propios recursos.
)Alguna vez soñaste en convertiste en la reina del merengue?.
No, el sinónimo de reina de merengue viene a raíz de la controversia que se suscita con la llegada de Olga Tañón.
Cuando escuché ese seudónimo por la radio me sorprendí. Los puertorriqueños siempre me han llamado «la Emperatriz del merengue», y cuando estaba con Joselyn nos llamaban «las señoras del merengue».
A seguidas dice que «siempre he dicho que todas las mujeres que incursionamos en el merengue somos reinas, porque es muy difícil que la mujer proyecte una imagen y se pueda mantener en su oficio y alternarlo con los deberes de la familia. Yo corono a cualquier mujer que se supere y tenga la valentía de trascender en lo profesional paralelo con lo personal».
Milly Siempre aspiró a cosas grandes, aún en los momentos difíciles de su vida. «Yo aspiro tener un final feliz, porque pienso que lo mejor está por venir», dice con gran optimismo.
En este año 2003 que casi finaliza, Milly ha vivido momentos significativos en su carrera artística y uno de ellos fue cuando recibió el Grammy Latinos como mejor álbum de merengue. «Dios me da oportunidad de recibir el premio para mi país y todos mis seguidores que por más de 25 años me han apoyado en las buenas y en las malas».
Además, recibió el premio «Paoli» en Puerto Rico, como cantante femenina de merengue del año. «Eso me lo regala el 2003 como una recompensa a toda mi trayectoria en el mundo de la música».
Otros logros importantes fue haber participado en el Festival Presidente de Música Latina que le permitió estar ante 55 mil personas.
También en los juegos panamericanos estuvo junto a otros talentos criollos que fueron anfitriones de los atletas internacionales que se dieron cita en el país. «No me puedo quejar del 2003 y no voy a dejar de soñar, siempre creo que todavía se pueden hacer cosas mejores».
Asimismo menciona que la separación con la disquera Sonny la recibió como algo positivo. «Lo veo como la libertad que necesitaba, en vista de que las condiciones no existían para yo darle continuidad a lo que deseo seguir haciendo».
De su nueva producción musical «En otra onda», donde está incluido el tema musical «Moriviví» de la autoría de Pavel Núñez, nos dice que «Lo hice para la Navidad y dar una muestra a mi pueblo y a mis seguidores internacionales de lo que quiero hacer en el nuevo año con mi próxima proyección que me permita abrirle pasos a nuevos talentos como es mi hijo Miguel Antonio, que colaboró en el disco «Pienso así» y Pavel Núñez que participó con el tema «Soñar despierta».
Para esta artista lo más importante que ha acontecido en su carrera este año es el premio Grammy como mejor álbum de merengue 2003. «Es una recompensa de una larga carrera, donde ha participado mucha gente, encabezada por el grupo original, cuando se llamaba «Milly Yoselyn y los vecinos».
A su juicio, este premio servirá de estímulo para el talento dominicano joven, para que tengan pendiente que con calidad e integridad se puede llegar; para el merengue y el país. «Yo soy de la que cree que tenemos un merengue bueno que identifica al país con mucha altura».
)Te ha cambiando en algo ese reconocimiento?.
Yo sigo siendo la misma porque creo que el tiempo y la experiencia me ha enseñando que con cada disco y actuación tengo un reto frente a mí que superar. Me parece que esto, en la medida que yo haga las cosas seré más consciente de lo que tengo que hacer, porque la gente tendrá una expectativa mayor».
Afirma que el Grammy coloca al artista en un sitial muy especial ante la fanaticada y en los ojos de la industria que hace que se sienta más comprometida.
«En ese sentido, el Grammy me hace más consciente de todo eso que no es fácil, pero lo hago porque me gusta».
A su entender, el disco «Pienso así» le llevó a ganar un Grammy, porque este fue el momento que Dios dispuso. «Algo que he aprendido espiritualmente es que las cosas suceden cuando Dios quiere, porque si fuera por mi deseo, lo hubiera hecho muchos años atrás, sin embargo viene hacer ahora, un disco producido por un puertorriqueño muy querido en este país, en un momento en que el merengue está atravesando transformaciones; sin Rafael, quien gestó todo lo que fue los Vecinos. De seguro que él se hubiera alegrado de este triunfo, porque siempre creyó en mí».
Opina que ni el éxito, ni la cima están en un lugar específico. «Eso es un proceso, aunque cuando todo artista comienza piensa que es un lugar que se llega en un momento determinado. Siempre decimos cuando sea grande, cuando sea famosa va a ser más fácil, y sin embargo, no hay un lugar, obviamente se crece y se siente una serie de satisfacciones que te llenan de orgullo, porque viene sembrando y hay momento de cosecha, pero es un proceso donde se va renovando, aprendiendo y creciendo con las experiencias positivas que no se acaba porque con la misma vida se va transformando hacia donde Dios nos lleve».
Milly expresa que su mejor reconocimiento, aún con el Grammy, sigue siendo su diploma de la Universidad en New York. «En un momento en que no estaba definida como artista, era esposa, madre, ama de casa, secretaria ejecutiva de día, estudiante universitaria de noche y los fines de semana cuando aparecía fiesta tocaba con la orquesta».
En su mirada se delata un aire de satisfacción cuando expresa que todo eso era mucho, pero el deseo de terminar sus estudios era lo que más le entusiasmaba. «Cuando logré a graduarme, entendí que la mejor inversión en el crecimiento personal son los estudios; es lo que nos suma como persona, y lo que más me llena de orgullo es haberme graduado».
Ha sabido levantarse de los momentos difíciles que le ha tocado vivir, y una muestra de esto fue cuando pierde a su esposo Rafael Vásquez, en el año 1996.
«Cuando Rafael murió tiré a la basura muchas placas y reconocimientos, porque la pérdida fue tan profunda que yo decía: de qué me sirve todo esto. Claro fueron cosas que debí haber conservado, porque tienen su importancia».
En medio de esta pérdida no pensaba que retornaría a los escenarios. «Para mí fue importante la oración de todo un pueblo cristiano que me apoyó».
Pero volvió a los escenarios con toda esa energía y sabor que siempre le ha caracterizado, y siete años después de la muerte de Rafael Vásquez llega el Grammy que corona el esfuerzo de Gilberto Santa Rosa, productor del disco «Pienso así»; de Pedrito Núñez, como maneger, y de Milly como solista.
)Qué hace Milly antes de una presentación?
Mi ritual es la oración, y otra cosa misteriosa que me pasa es que cuando viajo o voy a iniciar una presentación, siempre veo una mosca. Me sucedió en el Festival Presidente, luego de orar, la mosquita se paró en la puerta del camerino. Son tantas las veces que me ha sucedido que me pregunto qué tiene que ver esta mosca, pero como cristiana creo que todo obra para bien de los que aman al Señor».
Su fe se pone en evidencia cuando proclama que «les doy gracias a Dios por todo lo que me ha hecho vivir; por lo que me ha dado y me ha quitado, porque aunque ha sido muy doloroso por lo que he perdido, entiendo que sus obras son misteriosas y que Rafael vivió su tiempo y sembró la semilla que ha germinado en este triunfo tan bonito para mí y mi país».
Cuando cuestiono a la mujer y dejo de lado a la artista, me confiesa que desea rehacer su vida sentimental. «Mi corazón está ávido de convivir con una persona, trato de compensarlo con el trabajo».
)Cómo van los pretendientes?
En los últimos dos años he estado pendiente de gustar y coquetear. Estoy en plan de conquista, pero ya me he equivocado un par de veces, creo que la difícil soy yo porque mi vida es muy complicada en el sentido profesional, estoy sujeta a un itinerario en New York, Puerto Rico y República Dominicana».
«He vivido casi la totalidad de mi vida en New york, soy dominicana cien por ciento, pero tengo tres hijos domínico americanos que me tienen anclada. Mi responsabilidad primordial son ellos».
Expresa que la persona que llegue a su vida tiene que ser muy especial para que entienda, eso y se adapte a ese tipo de cosas y pueda diferenciar a la mujer de la artista.
Y es que la artista no busca pretendiente, porque tiene el aplauso y la adoración de un público internacional. «La artista está más que realizada. Es la mujer que está esperando su momento de reanudar su vida sentimental».
Milagros del Rosario Quezada Borbón es la contraparte de Milly. «Creo que Milagros celebra y disfruta todo lo de Milly. Tengo una anécdota que nunca puedo olvidar. Cuando estaba en el aeropuerto un señor se me acercó y me habló sin saber que era la artista, Milagros sintió una alegría tan grande de saber que alguien la había tomado en cuenta».
)Quién es Milagros?
Simplemente una mujer que aprecia las cosas sencillas, no tengo fortuna, sólo un compromiso que pesa porque me tienen en un pedestal que no debería ser. Soy una mujer que también tiene sus defectos. Me gusta leer, ahora mismo estoy leyendo el libro «El Camino de las Lágrimas», que nos explica cómo debemos dejar ir las cosas y «El camino de la felicidad», para aprender la voluntad de Dios».
Es la madre de Miguel, Anthony y Rafael, tres jóvenes que define como su mejor merengue y su mayor motivación. «Mi anhelo como madre es que sean importantes y que dejen huellas en la vida».
)Es difícil ser artista y madre?
Sí, tuve momentos de culpabilidad, es el caso de Anthony, que a veces veía en su rostro que me reprocha cuando debí estar a su lado; Miguel y Rafael se adaptaron muy rápido a mi carrera. A veces sentí que le debí dedicar más tiempo, pero mi pasión siempre ha sido la música. Creo que he sido buena madre porque ellos me persiguen como su amiga. Tengo credibilidad con ellos porque no le predico, yo le escucho, están muy orgullosos de mi trabajo. Esa es la recompensa por tratar de ser fiel a mis principios, sin dejar a un lado mi rol de madre».
El mejor ejemplo que le puede dejar a sus hijos es de haber vivido inspirada en su país. «vivir fuera me ha hecho ser más dominicana que quizás haber estado aquí, porque me siento muy nacionalista».
)De volver a nacer, qué te gustaría ser?
Me gustaría ser abogada o periodista. Si tuviera la oportunidad de vivir en este país, el reto más importante fuera de ser presidenta de la República, claro con la preparación y los recursos de lugar.
)Cómo defines este momento de tu vida?
Como una mujer en proceso y transformación de crecimiento. Sigo con la misma curiosidad de cuando empecé, creo que como solista y en los últimos cinco años que he estado sin Rafael, he aprendido mucho de mis colegas artistas dominicanos.
)Cuál es el mejor momento de tu vida?
Este momento en que junto con Juan Luis Guerra, Chichi Peralta y Michael Camilo, son artista que nos honran como dominicanos, el hecho de que el Grammy me pone en esa lista, me da la impresión de que este es un momento muy importante.
)A qué le temes?
Le temo mucho a la vejez. Yo le pido a Dios que me permita asimilar los años que me quedan por vivir con dignidad, tranquilidad y paz. «Soy viuda, tengo tres hijos y soy muy independiente. Dios me ha permitido los recursos para yo cubrirme. Temo a ser carga y le pido a Dios que me de la facultad de prepararme para tener un final feliz.
)Cómo puedes desafiar los años y proyectar una buena imagen?
Me hice una abdominoplastía y levantamiento de seno, después de eso me cuido mucho, no como de noche, cuando tengo show hago dieta una semana antes.
Milly Quezada entiende que este es el momento para alimentar nuestras vidas espiritualmente. «En estos tiempos es bueno hacer un alto y reflexionar internamente para buscar esa luz que es necesaria para alumbrar los momentos oscuros y por medio de Jesús encontraremos la verdad de nuestro entorno que se iluminaría cada día más».
