Tras saber que había parido dos siamesas unidas por el abdomen, Angélica de los Santos rompió en llanto, preguntándose a sí misma: “¿y ahora cómo me hago, qué será de mí, madre soltera con 5 hijos y sin trabajo?”.
Pero esa no es la única pregunta que se hace Angélica, quien solo tiene 28 años. “¿Cómo es posible que en este hospital (Alejandro Cabral), al que vine a chequearme este embarazo todas las veces que me recomendaron, donde me hicieron 10 sonografías, nadie me dijera nada y que sea cuando paro que me enteran de este problema que dizque nacieron unidas por las barriguitas?”.
Afirma que ya tiene más de 72 horas sin poder dormir, solo pensando en el drama que vivirá, porque ya antes de dar a luz a las siamesas padecía por sus problemas económicos.
“Yo quiero que el presidente Luis Abinader, que está demostrando que ayuda a quien más lo necesita, que se apiade de mí, que me ayude.
El es mi esperanza, no solo con una ayuda permanente para mí y mis otros tres hijos, sino también con el tratamiento de mis gemelas, incluyendo costear su posible separación, porque yo tengo fe en Dios que ellas vivirán porque la ciencia médica está muy avanzada”, clama en forma reiterada la atribula da madre Angélica de los Santos.
Desde la construcción del hospital regional universitario doctor Alejandro Cabral, en 1943, solo se han registrado dos partos de siamesas-gemelas hasta la fecha. El primero ocurrió hace 28 años, en 1992, según datos que fueron recabados por este redactor.
Tras correr la noticia del nacimiento de las siamesas-gemelas, decenas de curiosos han estado visitando el centro de salud con el interés de verlas, pero las autoridades del centro asistencial no lo permiten, tanto para mantener la privacidad de ellas como por la pandemia del coronavirus.
Las autoridades del hospital doctor Alejandro Cabral decidieron referir a las siamesas a la maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, en el Distrito Nacional, debido a que en la medida en que pasan las horas su salud ha estado desmejorando.