Brasilia (EFE).- Haití puede volver a caer en una crisis de inseguridad e inestabilidad política si no se refuerza la ayuda de la comunidad internacional a esa nación, según coincidieron ayer representantes de 16 países y once organismos multilaterales. 

La delicada situación social y económica de Haití fue analizada en Brasilia por representantes de los países involucrados en la cooperación con ese país y la conclusión fue que las elecciones celebradas en febrero pasado han sido sólo una “etapa” en el camino de la solución definitiva.

La Reunión de Alto Nivel sobre Haití, convocada por Brasil, fue preparatoria de la conferencia de países donantes que se celebrará el próximo 25 de julio en Puerto Príncipe, donde se espera que sean cuantificadas las ayudas económicas que este país requiere de la comunidad internacional.  Hasta ahora, los llamados países donantes se han comprometido a aportar 1.800 millones de dólares, de los que sólo la mitad ha llegado a las autoridades haitianas.

El chileno Juan Gabriel Valdez, hasta ahora jefe de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH), consideró que la población haitiana aún “no ha sentido que ha llegado alguna ayuda”, pues las carencias siguen siendo enormes y la miseria campea.

Entre los asistentes a la reunión estaban también los cancilleres de Argentina, Jorge Taiana, y Brasil, Celso Amorim, así como el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza.

Según Taiana, la MINUSTAH debe jugar un papel más importante “en la canalización de la ayuda económica” a Haití y no limitarse a un rol de “policía” en transición en que se encuentra el país.

Consideró que ese brazo armado de la ONU debe ampliar su radio de acción y comprometerse más en las “titánicas” tareas sociales que el gobierno del presidente René Préval tiene por delante. 

Pese a admitir los riesgos que amenazan a la naciente democracia haitiana, Insulza valoró en especial los “sustantivos” avances que ha habido en Haití en el plano político, con la celebración de las elecciones presidenciales.

Destacó en especial la ampliación del padrón electoral, que pasó de 66.000 a más de 3 millones de ciudadanos inscritos, lo que a su juicio demuestra el “elevado compromiso de la población con la democracia”.

Según el canciller brasileño, en esta reunión ha quedado claro que “no es preciso ser rico para ser solidario”, en alusión al fuerte componente latinoamericano de la MINUSTAH.

Amorim informó de que, fruto de esta reunión, han sido firmados acuerdos para ayudar a Haití entre Brasil, Argentina, Canadá y el Banco Mundial (BM), dirigidos especialmente a la cooperación técnica y la alimentación de los niños haitianos en edad escolar.

El representante en esta reunión de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), Armando Riesgo, dijo que España también ha decidido aumentar la “cantidad” y “calidad” de la ayuda a Haití y que llegará a Puerto Príncipe con una oferta concreta.

El ministro de Planificación y Cooperación de Haití, Roland Pierre, agradeció el “apoyo espontáneo a cambio de nada” recibido de la comunidad internacional y dijo que su país intenta cuantificar la ayuda que requiere.

Aclaró que es “prematuro” hablar de cifras y confió en que podrá hacer una presentación formal de sus necesidades en la reunión de Puerto Príncipe.

Pierre declaró que Haití espera ayuda de todos los organismos internacionales, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI), al que solicitará algún tipo de condiciones preferenciales.

A la reunión asistió también el guatemalteco Edmon Mulet, quien reemplazará a Valdez al frente de la MINUSTAH, y dijo que la reunión ha sido “fundamental” para reforzar la voluntad de ayuda de la comunidad internacional.

Según Mulet, la mejoría de las condiciones sociales en Haití será de vital importancia para fortalecer al presidente Préval, que aún está sobre presiones y con la difícil tarea de formar un gobierno de coalición que le permita dotar al país de la tranquilidad política necesaria. 

España reitera apoyo

Brasilia,  (EFE).- El gobierno español está decidido a aumentar la cantidad y calidad de la ayuda a Haití, país que se ha convertido en una prioridad, según dijo hoy el representante de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) Armando Riesgo, en Brasilia.  “El compromiso con Haití es más firme que nunca”, dijo a EFE Riesgo, quien asistió a la reunión de alto nivel sobre Haití celebrada en la capital brasileña con representantes de 16 países y 11 organismos internacionales.  Según Riesgo, España tiene un compromiso de cooperación muy importante, canalizado a través de la AECI y está estudiando un significativo aumento de la ayuda a esa nación antillana, cifrado hasta ahora en unos 16 millones de euros (20,5 millones de dólares).

Esta ayuda estará dirigida a tres áreas que Riesgo consideró fundamentales, como la gobernabilidad, el desarrollo sostenido y la construcción de infraestructuras, especialmente para garantizar el servicio de agua potable y saneamiento básico.

Otras áreas de interés para la cooperación española son la seguridad alimentaria y las políticas de género, explicó Riesgo.

El funcionario español dijo que también hay un proyecto para vincular las inversiones y programas españoles en el lado dominicano de la frontera con las que se desarrollan en Haití, a fin de contribuir a mejorar la situación conflictiva que existe actualmente en las áreas limítrofes de la isla.

Según Riesgo, los nuevos planes de cooperación y ayuda española a Haití serán anunciados formalmente en la reunión de países donantes que será celebrada en Puerto Príncipe a fines de julio próximo.

Además de Riesgo, la delegación española en la reunión celebrada en Brasilia estuvo integrada por el embajador español en Haití, Paulino González Fernández y el embajador en Brasil, Ricardo Peidro.