INDIAN WELLS, California, EE.UU. Rafael Nadal, con una de sus mejores exhibiciones en mucho tiempo, venció el viernes al japonés Kei Nishikori por 6-4, 6-3 para alcanzar las semifinales del Masters de Indian Wells. En busca de su cuarto título en el torneo, Nadal se las verá con Novak Djokovic.
El número uno del mundo dominó ambos desempates en su victoria 7-6 (2), 7-6 (2) sobre Jo-Wilfried Tsonga. La semifinal Djokovic-Nadal enfrentará a dos tenistas que se han combinado para siete títulos en el desierto californiano. Por su parte, Serena Williams remontó tras desperdiciar una ventaja de 3-0 en el segundo set para superar a Agnieszka Radwanska 6-4, 7-6 (1) y avanzar a la final por primera vez desde 2001, cuando ganó y posteriormente boicoteó el evento durante 14 años.
En la final de domingo, Williams se medirá a la bielorrusa Victoria Azarenka, que se clasificó para el partido por el título tras imponerse por 7-6 (1), 1-6, 6-2 a la checa Karolina Pliskova. Con temperaturas que alcanzaron los 32 grados centígrados (91 F), Nadal impuso su jerarquía en un partido disputado bajo un sol inclemente. Nadal arrancó perdiendo 3-1, pero ganó cinco de los siguientes seis games para llevarse el primer set en 45 minutos. Una rotura de saque al inicio del segundo parcial le permitió a Nadal sacar una ventaja 4-2. Pero el sexto preclasificado japonés logró quebrarle el servicio para acercarse 4-3. La respuesta de Nadal fue inmediata: nuevo quiebre y seguido sentenció el partido con su servicio.
Después de un inicio de temporada marcado por una prematura eliminación en el Abierto de Australia y tropiezos en la gira sudamericana sobre arcilla, el número cinco del mundo ha mostrado su mejor versión esta semana en las pistas duras del desierto californiano.
“Es una victoria contra un rival de fuste”, dijo Nadal, cuarto cabeza de serie del primer torneo Masters 1000 de la temporada. “Es importante para mi confianza”. “Me siente fuerte mentalmente. Vuelvo a sentirme como el de siempre, con la energía correcta”, dijo Nadal. “Puedo disputar cada pelota. Puedo mantenerme así durante todo el partido, teniéndome fe, y eso me hace jugar con más vigor, menos nervios. Eso es muy importante. Así es como he jugado durante todo mi carrera. Esta semana ha sido muy positiva para mí”.