Luego de un largo y doloroso proceso de rehabilitación, tras ser operado en su brazo izquierdo, el jardinero Ricardo Nanita asegura que se siente en perfectas condiciones y con suficiente fortaleza para ayudar a las Águilas a conquistar la esperada corona veintiuna.
Nanita ha impresionado en el campo de juego, y en la jaula de bateo; se le nota en condiciones físicas y con la mirada de tigre, listo para salir a cazar.
“Fue un proceso que todo el mundo sabe que es difícil; trabajé por ocho meses luego de la operación, de manera que me siento muy bien de salud y fuerte para poder ayudar a las Águilas”, dijo Nanita. El pimentoso pelotero que se vio muy limitado en la temporada pasada, fue enfático al asegurar que luego de la rehabilitación siente que le pega más fuerte a la pelota.
“Fue una de las rehabilitaciones más exigentes; yo iba a diario a cumplir con la meta y junto con las pesas y una buena nutrición, he logrado una fuerza que antes no tenía”, agregó.
Nanita también contó en su relato que durante estos últimos ocho meses trabajó también duro para fortalecer sus piernas y la agilidad, dado el hecho que juega en el jardín, posición que requiere esas habilidades. “Fortalecimiento para las piernas, nutrición, terapias, todo eso me está dando un excelente resultado y por tanto solo espero de mí mucha cosa buena, para ayudar a las Águilas, porque estos entrenamientos nunca los había hecho y desde ya estoy viendo los resultados, y todavía no ha empezado la temporada”, expresó.
Ricardo Nanita, que llegó a las Águilas en un cambio con los Toros del Este, desde hace tres temporadas, dice tener una motivación especial porque el equipo en general, tiene deuda con la fanaticada cibaeña.
“He llegado aquí y he encontrado un grupo excelente; estamos muy motivado porque sé que nuestro equipo tiene una deuda con los fanáticos y vamos a apoyarnos unos al otro desde que salgamos al terreno”, dijo al final.