DEDAYE, Birmania. AFP. Un reportero de la AFP logró ayer realizar el difícil viaje entre Rangún y el delta del sur del país que más sufrió los efectos del ciclón Nargis, hallando a su paso una situación estremecedora y «verdaderamente desesperada». Este es el relato literal del viaje: Miles de personas desesperadas se alinean a ambos lados de la carretera, y cada vez llegan más. Simplemente están ahí, fuera de sus casas en ruinas, esperando la ayuda del gobierno. Y no llega.
Tienen hambre y sed. Sus rostros muestran tensión y cansancio, y se nota que muchos no han comido apenas nada en días.
Las madres que amamantan sostienen a sus hijos con un brazo y alargan el otro para mendigar.
La gente no tiene cazos, se los llevó la tormenta junto a todo lo demás