POR CARLOS NINA GóMEZ
Décadas de los 50 y 60 en el boxeo profesional de República Dominicana: Dominio del peso mosca (112 libras).  Púgiles brillantes, en esa división: Natalio Jiménez, Ernesto Batista, Lachi Linares, Fermín Guzmán, entre otros.

De la categoría mosca, en aquellos años, ¿quién fue el más capacitado?. Es la pregunta de los ¡64,000!.

Cronistas deportivos dominicanos, que vivieron aquella etapa de oro, refieren que “la calidad de esos protagonistas (del peso mosca) era tan alta que podría ser un “atrevimiento” señalar a uno de ellos como “el mejor”.

No obstante, algunos de esos mismos veteranos comentaristas -y escritores de boxeo- de las décadas de los 50 y 60-, tienen criterios definidos…¡y hasta se lanzan a señalar a uno como el mejor!.

Otros, la mayoría, prefieren ser conservadores. Y se limitan a proclamar: “Es que todos los pesos mosca de aquellos tiempos eran excelentes”.

Tan excelentes, dicen, que si fueran miembros de la camada de ahora, en esta época (moderna), por lo menos dos hubieran sido campeones mundiales. Sin contar con los aditamentos de estos tiempos, con gimnasios deteriorados, peleando por bolsas miseriosas, sin prácticamente tener apoderados, con una vida licenciosa (poca disciplina) y en la víspera de sus peleas haciendo “desarreglos”, estos púgiles del peso mosca eran unos gigantes del cuadrilátero, según aprecian entrenadores y fanáticos de la época.

José Antonio Salcedo, conocer del boxeo de aquellos tiempos y quien llegó, incluso, a trabajar como juez-ábritro de varias peleas del boxeo de ayer, habla con positivismo de los peleadores de la división mosca.

Lo propio ha dicho -en un diálogo de hace varios años con el autor de estos trabajos- José “Cheché” Arias, quien trabajó como entrenador de estelares pugilistas. Salcedo y Cheché Arias coiniciden en la opinión expuesta en las primeras líneas de este escrito: “Ciertamente, varios de esos muchachos que eran boxeadores en los años 60s -del peso mosca- en estos tiempos del boxeo moderno, hubieran conquistado títulos mundiales”.

EL MÁS TÉCNICO

Natalio Jiménez, el mayor de los hermanos boxeadores Jiménez (los otros eran El Burro, El Chino y Fernando Jiménez) fue, a juicio de los veteranos especialistas, el más depurado de los moscas de la citada década.  Tan eficiente, en el plano técnico, era Natalio que podía botar los golpes -del contrario- con artísticos movimientos del torso…y, además, danzar durante todo el trayecto -con exhibiciones laterales- de una pelea sin recibir ni un “rasguño”.

Se recuerdan sus brillantes actuaciones frente a Ernesto Batista y Lachi Linares quienes fueron rivales de “alto calibre”. Frente a Batista, Fermín Guzmán y Linares protagonizó titánicas batallas.

BOXEO PROFUNDO

Natalio, resaltan expertos, protagonizó titátnicos combates con Lachi Linares. Con Lachi realizó cuatro combates y cayó, aunque parezca increeíble, en tres ocasiones. Todas fueran peleas bien reñidas y llegaron al límite de los asaltos a las que fueron pactadas. Cuando pelearon por cuarta vez Natalio salió airoso tras realizar una de sus eficientes faenas.

  Y según el testimonio de José Antonio Salcedo, cuando terminó este pleito, Linares fue a la esquina de su rival y, antes del veredicto de los jueces, le levantó la mano en clara señal de su derrota.

Fermín Guzmán también fue un rival de consideración de Natalio. Pelearon tres veces y Natalio salió victoriso en dos ocasiones. Todos estos combates -especialmente los que protagonizó con Linares, Fermín y Ernesto Batista- Natalio ofreció exhibiciones de buen boxeo…él era, aprecian periodistas de la época, un “rayo hecho boxeo”.

Y coinciden, por consenso, con el autor de este trabajo de que Natalio fue -y sin sobrestimarlo- el peso mosca más capacitado. Lo señalan como el mejor peso mosca en la historia del boxeo profesional del país.  El doctor Ramón Pina Acevedo, ex-presidente de la Comisión Nacional de Boxeo Profesional, va más lejos cuando afirma que “a Natalio Jiménez se le puede considerar como el mejor boxeador dominicano de todos los tiempos”.

Tal apreciación la hace el connotado jurista, pese a que Natalio ni siquiera tuvo la oportunidad de contender por una faja mundial.

Sin embargo, según recordatorio de expertos, anet Batista, en un reñido combate por la corona nacional mosca, tuvo que batallar bien duro…porque, agregan, enfrentó a un enemigo que, como Ernesto Batista, también tenía pleno dominio de los fundamentos del boxeo.

Batista, quien era igualmente un artista esquivando golpes parado, con finos movimientos de cintura, llegó a ser calificado como “un campeón mundial sin corona”.

Si Ernesto Batista no realizó -en su combate con Natalio, en 1959, por el cetro nacional mosca- se debió, fundamentalmente, a su indisciplina. Horas antes de su pleito con Natalio, según revelación de viejos fanáticos, se le vio “degustando” algunos tragos de alcohol, acompañado de atractivas damas”.

Sin embargo, ante Natalio,aunque hubiera estado en “excelentes condicioenes físicas”, Batista no iba a disfrutar de una victoria…porque Natalio, aprecian los mismos comentaristas y fanáticos, no sólo tenía la capacidad -y lo demostró aquella noche- para evadir puños de todos los calibres, sino una singular elegancia para conectar golpes también de toda clase: jabs repetidos, gancho con la izquierda, recto y oupercuts.

Con la gran exhibición ofrecida en aquella memorable pelea frente a Batista, Natalio Jiménez pasó a ocupar la primera casilla entre los más brillantes púgiles moscas de aquellos tiempos… entonces los expertos lo llamaron “el mosca más depurado”.

EL PRIMER RANQUEADO

 Natalio Jiménez, por la calidad enseñada en todos sus combates, tiene el gran honor de ser el primer boxeador dominciano que ocupó una casilla en el Ranking Mundial.

Después llegaron al Ranking Héctor “El Chino” Díaz y Carlos “Teo” Cruz….Teo Cruz, además, tuvo la fortuna de ser campeón del mundo. Fue el primer pugilista dominicano en anexarse un cinturón mundial cuando el 29 de junio de 1968 derrotó en 15 rounds al boricua Carlos Ortiz a quien le arrebató la corna del peso ligero.

Los cronistas deportivos de la época, tras informarse de la llegada al Ranking de Natalio, comentaron y escribieron- que a este fino boxeador se le comenzaban a abrir las puertas de la fama mundial.

Es decir, que ya veían en Natalio a un futuro campeón del mundo…sólo necesitaba recibir la oportunidad para conquistar el cetro mosca.

Sin embargo, la aspiración de Natalio se trunca…fue  una simple aspiración, pues el proyecto de ir a un combate para la ganancia del título mundial de las 112 libras no llegó a cristalizarse. Este artista del ring tenía magníficas condiciones físicas y técnicas para no sólo agenciarse el cetro mundial del peso mosca, sino ser un campeón duradero, de siete u ocho defensas.

Pero al no contar con un buen negociante del boxeo, un apoderado que tuviera las vinculaciones interncionales ajustadas al boxeo y, además, en el país no había nada de condiciones para que algún empresario, con influencia internacional y amor al boxeo, llegara a un acuerdo para tales fines. De manera que Natalio Jiménez, aunque dotado de las herramientas necesarias para ser un firme campeón mundial, se quedó en el camino,

Hoy Natalio, tras residir más de 20 años en Nueva York -pero alejado de los cuadriláteros-, ha regresado a su país.

Natalio vive en Santo Domingo y disfruta de una pensión que le pasa la Secretaría de Deportes gracias a la gestión realizada por el ex-boxeador Genaro Fanjul, actual Comisionado Nacional de Boxeo Profesional.