CARACAS. AFP.  La saturación en los puertos de Venezuela, país mayoritariamente importador, retrasó este año la llegada a las tiendas de juguetes y pinos de Navidad, obligando a los venezolanos a emprender largas búsquedas de regalos, y  también al gobierno a tomar medidas para acelerar su despacho.  

«¡Ha sido una odisea, pero encontré el Monopolio electrónico! Busqué en otras jugueterías y siempre me decían: agotado», dijo a la AFP Penélope del Monte en uno de los corredores de Juguetelandia, una de las principales jugueterías de la capital.  

El auge de importaciones, la burocracia engorrosa y la deficiente infraestructura en los principales puertos de Venezuela gestionados por la estatal Bolipuertos -Puerto Cabello en el noroeste del país o La Guaira a las afueras de Caracas- están detrás de esta demora.  

En Juguetelandia «falta recibir un 25% de mercadería para poder cumplir nuestra meta de ventas hasta el 24 de diciembre. Hay mucho retraso en los puertos y sabemos que dan prioridad a la descarga de alimentos», indicó a la AFP el gerente de esta tienda, Luis Rodríguez.  

Rodríguez señaló que incluso muchos juguetes de moda, como la Ballena Splash, «sólo llegarán a las ciudades más pobladas porque no habrá tiempo para distribuirlos» a otras zonas periféricas antes de Navidad.  

Hace dos semanas, las autoridades lanzaron un paquete de medidas para agilizar las operaciones tras reconocer que urgía despachar este tipo de mercancías y admitir que la infraestructura en los puertos es de los setenta y ochenta, por lo que no pueden recibir embarcaciones de gran capacidad.  

«Venezuela es el único país (de la región) que se quedó atrás hace 30 años con sus muelles», dijo la ministra de Transporte Acuático y Aéreo, Elsa Gutiérrez, recordando que el gobierno hizo millonarias inversiones para modernizar La Guaira, cuyas obras concluirán en 2014, y Puerto Cabello.  

Precisamente, estas obras han reducido en La Guaira el 30% de su capacidad operativa, mientras que las importaciones en el país subieron un 17% interanual en el tercer trimestre, hasta 13.940 millones de dólares, según el Banco Central.  

Venezuela importa la mayoría de productos que consume y según la firma Ecoanalítica, casi un 70% de los alimentos son importados o tienen componentes importados.  

El presidente de la patronal Conindustria, Carlos Larrazábal, estimó que el «funcionamiento ineficiente» de los desembarcaderos se debe a una «falta de mantenimiento» y al «deterioro de las maquinarias de descarga».  

«Actualmente hay demoras de más de 30 días» para sacar una mercadería, señaló.   En 2010, Bolipuertos fue duramente criticada tras el hallazgo en Puerto Cabello de miles de toneladas de alimentos descompuestos, aunque finalmente la importadora estatal de alimentos PDVAL fue responsabilizada del caso.   La saturación actual