Para la cena de Nochebuena, además de planificar cuáles alimentos se van a consumir, un detalle muy importante y el cual es imposible dejar pasar, es la preparación de la mesa.

Es por eso que hay que tomarse su tiempo para organizar el lugar donde no solo reposarán los alimentos, sino también donde la familia y los invitados pasarán un rato ameno, conversando mientras degustan la cena.

La vajilla, mantelería, cubertería, e incluso los adornos que utilices, podrían hacer la diferencia. Es por eso la importancia de saber elegir cada detalle que vaya a estar sobre la mesa.

Para elegir el mantel, por ejemplo, debes tomar en cuenta que cubra toda la mesa, pero no que ruede por los pies de los comensales. El estilo de este debe ir acorde con la vajilla y el tipo de reunión. Si es de gala o informa. Debe haber armonía entre todos los elementos de la mesa.

En cuanto a las vajillas, procura tener en la mesa los tipos de platos y vasos, que vayan acorde con los alimentos que vayas a servir.

Pasa lo mismo con la cubertería. Seguro que en la mesa se servirá carne, por lo que deberías tener a mano cuchillos con serrucho, para facilitar el corte a los invitados.

Los adornos. Como estamos en tiempo de Navidad, es fácil conseguir adornos alusivos a la época, que puedes colocar sobre la mesa, como centro o en algún otro espacio de la misma, si el mueble es grande. Procura que el adorno no sea muy grande, para que no sea más bien un estorbo para los comensales.

No solo de rojo. Si quieres dar un toque diferente a tu mesa, recuerda que hoy en día la Navidad es multicolor. Puedes valerte para decorar tu mesa del azul, dorado, plateado, blanco…