La caída de la demanda de mercancías a nivel mundial ha comenzado a tener consecuencias entre las navieras. Maersk Line, la mayor compañía mundial de transporte marítimo de mercancías, perteneciente al conglomerado danés A.P. Moeller-Maersk, estudia reducir su plantilla global «en al menos 4.000 efectivos» para finales de 2017 en el marco de una serie de iniciativas para reducir costes ysimplificar su estructura.

Se trata del 17,3% de su plantilla. Maersk Line cuenta actualmente con una plantilla compuesta por 23.000 personas, que pretende recortar en al menos 4.000 efectivos para finales de 2017 mediante automatización y digitalización de procesos.

La compañía ha decidido acelerar una serie de iniciativas de ahorro de costes ya establecidas con el fin de reducir la capacidad de su red y aplazar algunas inversiones, además de reducir sus costes operativos intensificando los planes para simplificar la organización.

«En vista de la menor demanda, estas iniciativas permitirán a Maersk Line cumplir su ambición de crecer al menos en línea con el mercado y defender su posición de liderazgo», expuso la empresa.

Reducción de costes. En este sentido, la compañía pretende reducir este año los costes en 250 millones de dólares (229 millones de euros), con un impacto de 150 millones de dólares (138 millones de euros) en 2016.

Asimismo, en respuesta a las actuales previsiones de mercados, reducirá la capacidad de su red en el cuarto trimestre y a lo largo de 2016.

De este modo, la multinacional llevará a cabo el cierre de cuatro servicios y planea cancelar 35 rutas en el cuarto trimestre.

Además, Maersk Line no ejercitará su opción sobre seis barcos de transporte de contenedores, así como sobre dos buques de enlace, mientras que aplazará su decisión sobre la opción que mantiene sobre otros ocho buques de transporte de contenedores. El pasado mes de octubre, Maersk Oil, filial petrolera de A.P. Moeller-Maersk, anunció su intención de suprimir entre un 10% y 12% su plantilla.