Las incidentadas negociaciones entre el Colegio Médico Dominicano (CMD) y el Gobierno parecen entrar en un camino sin retorno, ante la dificultad de encontrar un entendimiento sobre el salario y las horas de trabajo que deberían cumplir los profesionales de la salud.

Mientras tanto, la amenaza de una huelga en los hospitales públicos está latente, y al parecer es la carta bajo la manga con la que cuentan los médicos para presionar al Gobierno en sus reclamos.

El presidente de la comisión de Salud del Senado, Luis René Canaán, afirmó ayer que provoca mucha preocupación la actitud del presidente del CMD, Waldo Ariel Suero, quien, según dijo, se aleja de las negociaciones que mantiene el gremio con el Gobierno en procura de mejoría salarial para los profesionales de la medicina.

El legislador manifestó que el Gobierno ha mostrado una posición de apertura y avance para complacer la mayoría de las demandas del CMD.

Citó los casos de las pensiones, del aumento salarial al sueldo básico, incentivos y otras demandas para las que el Gobierno se compromete a invertir más de RD$8,000 millones para a través del Presupuesto General del Estado para el año próximo.

“Entonces, no hay manera de zanjar estas diferencias que no sea en la mesa del diálogo”, expresó el senador Canaán respecto a las negociaciones entre el CMD y el Gobierno.

El presidente de la comisión de Salud del Senado hizo un llamado al Comité Ejecutivo del CMD para que mantenga al presidente de ese gremio Waldo Ariel Suero, de que no abandone el diálogo.

Destacó que el Gobierno ha hecho pública su decisión de mantenerse en la mesa del diálogo bajo la coordinación de la Iglesia Católica en la persona del reverendo Jesús Castro.

Sin avances. Luego de una larga jornada de reuniones que se llevan a cabo desde el mes de abril, se mantiene el tranque entre las autoridades y el CMD y el Gobierno en torno al aumento salarial que reclaman los médicos.

Para hoy a las 10:00 de la mañana el gremio convocó a una rueda de prensa para referirse al tema.

Mientras que el director del Servicio Nacional de Salud (SNS), Nelson Rodríguez, reiteró que el Gobierno mantiene la apertura al diálogo y búsqueda de un punto de advenimiento.

Con relación a la propuesta del exsuperintende de Salud Bernardo Defilló de que se aplique una tarifa por hora, Rodríguez dijo que cuando se calcula el salario mensual ya está implicada la tarifa.

Apuntó que el Gobierno solo busca que los médicos cumplan con la jornada laboral de 30 a 40 horas semanales como establece la ley, por lo cual no puede estar sujeto a discusión, sino que debe acatarse.

Indicó además que cada establecimiento de salud debe organizar su jornada laboral de acuerdo a sus necesidades y la demanda de servicios.

Puso de ejemplo que un cirujano puede tardar en una cirugía siete u ocho horas y no la va detener a las cuatro horas porque se pasó del horario. De hecho, hay médicos que trabajan en la zona fronteriza y van dos días y hacen guardia presencial y ya tienen 48 horas.