Un reconocido abogado y activista de Santiago, Ramón Antonio Veras (don Negro Veras), lamentó el característico modelo de la sociedad dominicana, el cual dijo que se evidencia por la inseguridad ciudadana, un precario servicio de salud y educación pública, así como el bajo ingreso económico de la gente para lograr una vivienda propia.
Por igual, considera que la corrupción, el ladronismo, la prostitución, el narcotráfico, la pobreza y el hambre son peculiares y característicos de ese modelo de la nación.
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“Por muy beneficiada que sea una persona por la forma como está regido nuestro país en el orden económico, político y social, debe reconocer que no es la más adecuada para el desarrollo humano”, afirmó.
Negro Veras manifestó que la mayoría de las mujeres dominicanas que deciden parir y habitualmente vivir en su país, están expuestas, ellas y su niña o niño, a toda clase de daños morales y materiales.
Indicó que el ser humano pobre que por accidente nace en la República Dominicana, llega al mundo de los vivos con su ataúd debajo del brazo, “porque lo único que tiene asegurada es su muerte”.
“Porque no hay seguridad, cualquier persona está expuesta a que le desprendan la cabeza, así por así, como si nada. Cada quien garantiza su existencia con los medios que estén a su alcance”, externó.
A juicio del reputado jurista y activista, a la generalidad de la población dominicana lo que le conviene es conservar su salud, “porque si cae enferma no hay servicio de salud pública garantizado. Lo que le queda es morir”.
Negro Veras dijo que tener una formación escolar de calidad en el país es para los ricos, tras señalar que la que el Estado le ofrece a la gente del pueblo es mala y cada día peor.
Igualmente, consideró que el tema de la vivienda digna es un concepto para ocupar un espacio en la cabeza de los marginados sociales. Los oprimidos lo que tienen asegurados son los despeñaderos, aseguró Veras.
“La sociedad dominicana lo que ofrece lo deja ver, porque, además, las lacras están ahí, como testigo de piedra. No hay de otra. No se puede tapar lo que la realidad saca a la luz. El régimen económico vigente no puede tomar el país entero como una huronera, un escondite, un lugar de escondecucas”, afirmó.