El estilo glam crea una ambientación lujosa, elegante, incluso un poco extravagante, donde los colores metálicos como el dorado y el plateado, al igual que los neutros, como el negro y el blanco, son los grandes protagonistas.
Desde luego, este es un estilo pensado para personas extrovertidas, divertidas y “modernas”… a las que les gusta el ambiente más festivo, las marcas y los productos más sofisticados.
Puedes combinar todos los tonos que incluye esta ambientación u optar por fusionar dos o tres. Por ejemplo, una excelente alternativa es el negro y el dorado.
El negro es el color de la noche y el misterio, pero también se le asocia con la sobriedad y el glamour. Mientras que el dorado está relacionado con la riqueza, los lujos y los gustos más exquisitos.
Cuando se mezclan estos tonos, y más aun para decoración de interiores, se logran diseños llenos de sofisticación y clase.
Ya sea que te decantes por un estilo clásico o contemporáneo, incorporar esta dupla en tu hogar te permitirá crear estancias llenas de estilo e imponencia, solo tienes que aprender a emplearla de forma estratégica en paredes, muebles, lámparas, cuadros, mesas, cortinas…
Ideas. Una alternativa que siempre funciona es conjuntar una pared pintada completamente de negro, con un gran espejo dorado.
Para acabar el conjunto, lo ideal es combinar el espejo con una repisa o mesita negra, y poner encima alguna cerámica o detalle dorado.
Esta idea puede funcionar a la perfección en una de las paredes de la sala o para un recibidor.

Otra opción es ambientar paredes negras con detalles dorados como cojines, lámparas o marcos de cuadros con sofás en tonos grises.
Para el comedor, puedes emplear sillas lisas de color negro con finas líneas en dorado, así como lámparas colgantes negras con luces doradas y un juego de cortinas en el tono de las lámparas.

¿Con otros tonos? Si te preguntas si puedes unir estos dos grandiosos colores con otros, la respuesta es: ¡sí!

Está permitido jugar con gamas de colores con mucha fuerza, como el azul, el rosa y el verde intenso.

En medio de un ambiente con paredes negras y cuadros y lámparas doradas, puedes insertar un sofá verde jade.
O si tienes un mueble negro, unos cojines azules causarán un impresionante efecto en tu decoración.

Utilizar estas tonalidades te permitirá crear estancias simplemente hermosas, llenas de feminismo, fuerza, armonía y sobre todo, buen gusto.