Neruda, Picasso y el Canto General

Neruda, Picasso y el Canto General

Aún el mismo Pablo Picasso no podía imaginar, al momento de recibir aquel ejemplar del “Canto General” de manos de su autor, en aquel grandioso acto en París, lo que más tarde sucedería.

Siendo senador, Pablo Neruda hubo de entrar en clandestinidad acosado por la persecución política. Con la ayuda del Partido Comunista y un conjunto de amigos, logró atravesar la frontera de Argentina  mientras evadía la Policía, a la vez que escribía  “El Canto General”, una de sus obras fundamentales. La historia es recogida por el escritor chileno José Miguel Varas en: “Neruda Clandestino” (Alfaguara, 2003).

El libro, escrito en los distintos escondites donde estuvo el poeta, se distribuía  en hojas sueltas en esquinas y mercados.

La imprenta Pacífico, controlada por el Partido Comunista en Santiago de Chile, imprimió 5,000 ejemplares.

Uno de aquellos ejemplares llegó a manos de Neruda en el momento en que asistía en París a un acto en homenaje a Picasso, a quien se le había otorgado el premio Stalin.

Neruda fue uno de los oradores en aquel emotivo acto donde el pintor era objeto de saludos y regalos.

El escritor narró las peripecias de su clandestinidad, su llegada a París y sobre todo el tortuoso proceso de edición del libro.

El aplauso y la emoción llegaron al máximo cuando con toda solemnidad  Neruda regaló el libro al homenajeado.

El poeta levantó el libro y la mano de Picasso.

La ovación estremeció el edificio, todos se pusieron de pie alborozados.

Terminado el acto, Neruda se acercó al pintor a quien arrebató el libro a la vez que le decía: -Es el único ejemplar que tengo.

El pintor no salió de su sorpresa frente al hecho. No hay dudas de que  los genios también tienen su carácter.  

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