El presidente de la Cámara Dominicana de la Construcción, Diego de Moya Canaán, dijo ayer que al menos los constructores que conoce no usan la práctica de cobrar la Seguridad Social y no reportarla.

De esa forma responde a la denuncia del director ejecutivo del Fondo de Pensiones de los Trabajadores de la Construcción, Luis Miguel Martínez, quien al participar el jueves  en el almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio denunció que la mayoría de los constructores cobra la Seguridad Social, pero no la reporta.

En declaraciones para Hoy, de Moya Canaán no descartó que exista esa práctica en la construcción, pues especificó: “No tengo el control de uno por uno (de los constructores)”. 

Aunque explicó que no es su  función estar verificando quién cumple con esa obligación, enfatizó que los constructores que  conoce no usan esa práctica.

De acuerdo con lo denunciado por  Miguel Martínez, la mayoría de los trabajadores de la construcción no están cubiertos por el  Sistema de Seguridad Social, a pesar de que los constructores les cobran las cuotas correspondientes, pero no las reportan.

A juicio suyo,  se dan casos de patronos del sector construcción que en una obra de cien trabajadores solo declaran diez obreros y los 90 restantes no los  reportan al sistema. Sin embargo, el patrono le cobra las cotizaciones correspondientes al total de trabajadores, dijo Martínez.

Sostuvo que esa situación se produce desde hace tiempo y  afecta a los trabajadores de la construcción en el sentido de que cuando llegan a la edad de pensión no cuentan con las cotizaciones requeridas para ser incluidos en los sueldos de jubilaciones.

Se refiere a las pensiones que otorga el Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS) a trabajadores de distintas áreas y también  a las que asignan las administradoras de fondos de pensiones (AFP).

Para optar por una pensión del IDSS o de las AFP el trabajador debe tener como mínimo 400 cotizaciones hechas. Las cotizaciones deben ser entregadas y reportadas por el patrono al IDSS o a la AFP correspondiente.

Las cotizaciones se nutren de descuentos a los trabajadores y de un porcentaje que debe aportar el empleador para el fondo de pensiones.

Martínez destacó que el sector construcción tiene una característica distinta a la mayoría de subsectores empresariales: el trabajador dura poco tiempo en la empresa, pues desde que termina un proyecto se va a otra y en muchos casos hay obreros que se quedan sin trabajo durante meses. Esta situación les dificulta a los trabajadores completar las 400 cotizaciones mínimas para optar por una pensión, dijo. Por la situación, dijo,  a las AFP no les interesa afiliar a trabajadores del sector.