POR GERMAN MARTE
Los contratistas canadienses a cargo de los trabajos de saneamiento de la cañada Guajimía y sus afluentes negaron ayer que los apartamentos construidos para reubicar a unas 208 familias del entorno resultaran inundados durante los aguaceros de la semana pasada.
El consorcio Dessau-Soprin Can-American y su contraparte de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santo Domingo (CAASD) afirmó que los trabajos de saneamiento de la cañada marchan apropiadamente.
Negaron, asimismo, que las aguas de Guajimía hayan inundado algunos de los apartamentos construidos para alojar a una parte de familias que viven en la ribera de la inmunda cañada.
De acuerdo con denuncias de residentes en el lugar, varios de los apartamentos construidos por el gobierno para alojar a las primeras 208 familias de Guajimía se inundaron a consecuencia de los torrenciales aguaceros de hace una semana.
El ingeniero Rene Bourdages, director del proyecto de Saneamiento Pluvial y Sanitario de la Cañada Guajimía, explicó en rueda de prensa junto a otros ejecutivos de Dessau-Soprin que las aguas que se observaron en el lote donde están los apartamentos provino de un lote vecino y no como producto de un desbordamiento de la cañada, como se ha dicho.
Adujo que el agua corrió por las calles del proyecto, pero no pasó del contén y jamás alcanzó el primer nivel de los apartamentos. Empero, reconoció, que es necesario retirar una gran cantidad de desechos sólidos que obstruye el drenaje debajo del puente que está en la avenida 27 de Febrero.
Indicó que el próximo paso es reubicar unas 40 familias que residen próximo al puente de la 27 para hacer el reperfilado de la cañada.
Explicó que el proyecto que realiza el gobierno a través de la CAASD tiene un costo de US$83.5 millones, contempla el saneamiento de 8.5 kilómetros, canalización de las aguas pluviales, la construcción de colectores sanitarios, redes de agua potable y una vía de acceso de dos carriles.
Manifestó que los 208 apartamentos que ya fueron terminados forman parte de un total de 1,300 que servirán para reubicar a igual número de familias del entorno de la peligrosa cañada. El proyecto se terminará en junio del 2009.