Aeropuerto Las Américas. Los dignatarios, personalidades nacionales e internacionales, diplomáticos, legisladores y las máximas autoridades eclesiásticas  favorecidas con el uso de  los salones de embajadores, gubernamental y VIP, de esta terminal aérea,  no están exentos de cumplir los chequeos de rigor y    revisión de  documentos y equipajes.

Pero las personas que por su alta investidura pueden  disfrutar de las facilidades de esos salones tienen que hacer la solicitud de su uso 48 horas antes de salir del país o llegar del exterior, mediante comunicación al Ministerio de Relaciones Exteriores o al Departamento Aeroportuario.

Así lo  informó  Carlos Cota Lama, subdirector del Departamento Aeroportuario y representante del Gobierno en esta estación,  a propósito del escándalo que  suscitó el cantante  Antonio Peter de la Rosa (Omega), quien sacó tres maletas sin las revisiones de lugar.

El 6 de este mes Omega,  con la ayuda de militares,  sacó del aeropuerto tres maletas que no cumplieron con los chequeos reglamentarios, por lo que las autoridades aduanales  no saben  qué contenían.  Para ello usó  un vehículo que llegó hasta una área restringida.

Esa situación provocó la suspensión de funciones de un coronel, el apresamiento de otros militares de menores rangos pertenecientes al Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (Cesa)  y el traslado de los agentes de Inteligencia Aduanal, quienes estaban de servicios el día que ocurrió esa anomalía.

 Cota Lama explicó que  en los salones de embajadores, gubernamental y VIP, este último manejado por el Consorcio Aerodom, hay un personal para asistir a los usuarios en el chequeo de los documentos de viaje, pasaportes, boletos y revisión de sus equipajes.

Revisión por rayos X.  El funcionario dijo que las maletas, bultos y otros equipajes de los beneficiarios de los indicados salones son pasados por las máquinas de rayos x, revisados en los salones de aduanas y luego entregados a los propietarios en la misma zona por donde salen todos los pasajeros normales.

Igualmente precisó que las reglas para el uso de las citadas áreas son  muy rígidas y especificas, aplicadas a todo el mundo sin miramiento de posición que pueda ocupar el beneficiado en el momento.

“Pero además el uso de los salones, no es más que una facilidad al dignatario, funcionario y personalidad beneficiada, para que pueda descansar, tomarse un café, un refresco o simplemente conversar con quien desee, antes de abordar el vuelo hacia su destino”, expresó el subdirector del Departamento Aeroportuario.

Sin embargo, reconoció que en el pasado  el uso de los salones de embajadores, gubernamental y VIP, se relajó, pero que en los actuales momentos las autoridades de turno son sumamente rígidas en su facilitación.

Las claves

1.  La irregularidad

Con la ayuda del  ex general del Ejército   Miguel Antonio Encarnación,  Omega burló los controles del aeropuerto.

2.  Agentes del Cesa

Una comisión de oficiales que investigó el caso determinó que el cabecilla de la irregularidad es el coronel del Ejército  Julio Polanco,   supervisor  del Cesa. El jefe de Seguridad del AILA,  coronel de la Fuerza Aérea  Miguel Jiménez Ventura, cumple una sanción disciplinaria por  20 días.