Niño herido cuando mataron padre murió; familia niega fuera por robo

Niño herido cuando mataron  padre murió; familia niega fuera por robo

Falleció al mediodía de ayer a causa de una encefalitis y falla multiorgánica el niño Maicol Esteban Encarnación Báez, de dos años de edad, mortalmente herido cuando delincuentes asesinaron a tiros a su padre, el raso policial Paúl Encarnación Mejía.
La información la ofreció ayer la doctora Noldis Naut Suberví, directora general del hospital pediátrico Hugo Mendoza, donde fue llevado el pequeño con un impacto de bala en la cabeza.
El menor recibió el disparo que entró por el cuello y salió por la parte frontal. Estuvo hospitalizado cuatro días en la unidad de Cuidados Intensivos y no rebasó su estado crítico, informó la dirección del centro de salud.
El cuerpo fue llevado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) en el hospital Marcelino Vélez Santana.
De acuerdo con la Policía Nacional, el móvil del ataque fue primero un asalto para quitarle el teléfono celular al padre del niño.
No obstante, la familia de las víctimas niega esa versión y anuncia una marcha al palacio policial para demandar el esclarecimiento de las muertes.
La viuda, Lucía Báez, explicó que después de dispararle a su esposo los delincuentes huyeron y no le quitaron nada y que incluso el celular estaba tirado.
Dijo que teme por su vida y pidió investigar, porque entiende que tuvo que ver con el soborno que rechazó Encarnación Mejía a cambio de no detener a narcotraficantes.
El niño, que estaba en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital, nunca presentó una evolución favorable y estuvo con ventilación mecánica hasta que falleció. Cuando fue trasladado al centro médico tenía algunos signos vitales, pero su situación siempre fue crítica.

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