Los niños haitianos con piernas o brazos amputados por las lesiones sufridas en el terremoto del pasado 12 de enero, y que viven en campamentos, requieren de juguetes que les permitan intentar jugar en medio de la calamitosa situación. La encargada del Departamento Legal y de Derechos Humanos del Movimiento de Mujeres Dominico-Haitianas (Mudha), Jenny Morón, dijo que cientos de menores con distintas operaciones, no tienen un juguete que los ayude a sonreir. Expresó que los niños están en un ambiente de vulnerabilidad. Mudha recibe estas donaciones en la calle Delgado, número 20, casi esquina Independencia, Gascue.