La Federación Nacional de Transporte Dominicano (Fenatrado) afirma que el Gobierno le debe 300 millones de pesos y que algunas de las deudas datan del 2004. El Gobierno no ha negado ni hecho aclaración alguna al respecto, lo que parece ser una admisión de lo que afirma el gremio de camioneros. Debido a falta de pago, Fenatrado ha decidido paralizar el transporte de carga a nivel nacional  durante 48 horas a partir de este martes. Esta organización, que monopoliza la movilización de carga, sabe muy bien la magnitud de los perjuicios de  una medida de fuerza de ese tipo.

 Sin desconocer el derecho de Fenatrado a reclamar el pago de esa deuda, recomendamos que esta organización reconsidere el llamado a paro nacional limitado del transporte de carga. La medida tendría consecuencias negativas para el sector privado, que no tiene nada que ver en la deuda que el Gobierno ha acumulado con el gremio. Por otra parte, no sería saludable que grupos políticos utilicen como  materia de campaña un asunto de meras relaciones comerciales entre demandante y prestador de servicio de transporte de carga.

Las garantías jurídicas de que disfruta el país ponen  al alcance de cualquier acreedor instrumentos efectivos para efectuar el reclamo de pago de deudas sin necesidad de torcerle el brazo a terceros sectores no vinculados con estos conflictos.

Rehabilitación de drogadictos

El Doctor Francisco Moscoso Puello está en vías de convertirse en el primer hospital  del país en contar con una unidad especializada en rehabilitación de personas adictas al alcohol y otras drogas.

 Recientemente el Ministerio de Salud Pública inició la construcción de esta área, en la que se invertirán más de 8 millones de pesos.

La adicción a drogas es un problema de salud pública en nuestro país. El hecho de que el narcotráfico pague en especie los servicios locales de trasiego y distribución,  ha creado un mercado de oferta-consumo preocupante.

Cada día, más jóvenes quedan inscritos en la lista de adictos al consumo de alcohol y otras drogas. Hay que abrir unidades de rehabilitación de adictos en otros hospitales a nivel nacional, para devolver a la sociedad parte del activo social  dañado por la adicción.