Los nuevos préstamos externos, la crisis bancaria que ha sacudido al país y la alarmante devaluación del peso dominicano son los factores principales que devorarán el Presupuesto Nacional del 2004, estimado en RD$103,934 millones por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Las informaciones recopiladas por este diario, que recogen la opinión de varios economistas consultados sobre el tema, indican que el nivel de endeudamiento con relación al Producto Interno Bruto (PIB) ha crecido hasta llegar a un 33.8% del PIB para finales del 2003.

Por ello se espera que en el próximo año los dominicanos pagaran por el servicio de la deuda unos RD$40,000 millones, equivalente al 40% del presupuesto del 2004, de acuerdo con las declaraciones emitidas recientemente por el director general de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONAP), Luis Ernesto Pérez Cuevas.

También, el economista Rafael Camilo ha estimado que la deuda externa de República Dominicana ascendería a cerca de US$6,000 millones para finales de este año (calculados a la tasa de cambio actual, situada en los RD$40 por US$1), mientras que la interna se situaría en más de US$2,100 millones (unos RD$84,000 millones), según los cálculos realizados.

Estos montos se alcanzarían con los desembolsos que hasta diciembre próximo recibirá el país por concepto de los préstamos del Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el FMI, tras la firma del acuerdo stand by con esta última entidad, según informaciones del Banco Central.

Mientras tanto, según los datos recabados, si se destina el 40% del presupuesto al pago del servicio de la deuda pública, quedarían disponibles unos RD$60,000 millones para el resto de las obligaciones del Gobierno, como pago de nómina, gasto social e inversión real entre otras obligaciones.

También recientemente, el economista Pedro Silverio, director ejecutivo del Centro de Investigación Económica de las Antillas (CENANTILLAS), estimó que en el próximo año la nómina pública absorbería el 30% del gasto público. En este año la nómina estatal ascendió al 29.8% del gasto público.

De acuerdo con las condiciones pautadas en el Acuerdo stand by pactado con el FMI, el monto asignado al Presupuesto y el pago del servicio de la deuda son obligaciones impostergables, ya que corresponden a las metas de dicho acuerdo, cuya carta de intención establece un tope de RD$103,934 millones para el Presupuesto del 2004. El mismo acuerdo con el FMI señala que en el 2004 los ingresos del Gobierno deben ser superiores en 1.1% a sus gastos, meta que varios economistas consideran difícil de alcanzar.

Se estima que para el 2003, incluyendo las medidas impositivas aplicadas administrativamente, el Gobierno puede lograr ingresos por RD$82 mil millones. Estas medidas impositivas fueron el recargo del 2% a las importaciones, el 5% a las exportaciones, el 0.15% a las operaciones con cheques en la Cámara de Compensación del Banco Central, y el incremento de US$10.00 al impuesto de salida de pasajeros.

También, el economista Eduardo Tejera destaca como algo contradictorio que en el acuerdo stand by con el fondo se fije un tope del Presupuesto Nacional de RD$84,568 millones para el 2003 y de RD$103,904 millones para el 2004, lo que reportaría un incremento de 23%, el cual, en un escenario de crecimiento negativo del PIB, no es económicamente viable.

El problema de la deuda pública es la posibilidad de pago, algo que se veía venir y que se alertó, en los momentos en que el país se embarca en nuevos créditos.

Para el 2004 se espera que la deuda pública se sitúe en el 49.3% del PIB, y para el 2005 en 49.6%. En ese período, bajo la sombra del acuerdo con el Fondo, la externa pasaría desde 35.6 a 35.2%, mientras que la interna sería de 13.7 y 13.4%, respectivamente.

Este alto endeudamiento, y las obligaciones de pago que conlleva, afectará negativamente la partida destinada a servicio social, y obligará al Gobierno a aumentar sus presiones fiscales.