Hasta ahora son 15 las naciones de América Latina en donde se han detectado casos de aves enfermas con esta patología, que en Estados Unidos ha causado estragos
Ante la amenaza que representa la expansión de la gripe aviar en América y el resto del mundo, el Gobierno y los granjeros dominicanos han estado coordinando medidas preventivas como el fortalecimiento de los controles fitosanitarios y la vacunación, pero el riesgo tiene tanta importancia para la seguridad alimentaria y la economía dominicana que el trabajo no debe darse por terminado.
Hasta ahora son 15 las naciones de América Latina en donde se han detectado casos de aves enfermas con esta patología. Los últimos casos afectan a la Argentina, Guatemala y Uruguay.
La entrada de la gripe aviar al territorio nacional no solo haría peligrar la seguridad alimentaria del país, sino que también tendría consecuencias nefastas para la economía, si se toma en cuenta que la industria avícola mueve alrededor de 45,000 millones de pesos al año y que constituye la principal fuente de proteínas de la población dominicana, a través del consumo de pollos y huevos.
De acuerdo con la Asociación Dominicana de avicultores (ADA), el consumo per cápita de pollo se expandió de 32.53 kilogramos en 2020 a 38.74 kilogramos en 2021, mientras que el consumo de huevos pasó de 223 unidades a 266 en el mismo período.
En el país existen 25 plantas de incubación, 11 plantas de beneficios de aves con siete marcas reconocidas, 40 plantas medianas, 1,500 puntos de distribución caliente y más de 100 distribuidores a mercados populares.
Son datos que deberían llevarnos a tomar todas las medidas preventivas necesarias para disminuir ese riesgo, asumiendo incluso el costo de sobreactuar antes que dejar cabos sueltos por los que puedan colarse sorpresas, sin excluir la prohibición de carne de pollo y de subproductos de esta carne utilizados por la industria local, aunque también hay que reconocer que el éxito requerirá de un poco de suerte, porque en el caso de las aves migratorias que llegan al país es poco lo que se puede hacer.
El país debe mirarse en el espejo tanto de lo ocurrido en el propio territorio nacional con la fiebre porcina, que obligó al Estado a destinar cuantiosos recursos para apoyar a los productores que se vieron obligados a sacrificar sus animales para enfrentar la enfermedad y también en lo que está sucediendo en Estados Unidos, donde la gripe aviar ha provocado la muerte de 60 millones de aves, de las cuales cerca de 43 millones eran gallinas ponedoras. Este es el principal factor causante de que una docena de huevos grado A en Estados Unidos se encuentre ahora en 3.60 dólares, cuando el año pasado, aproximadamente en la misma fecha, la docena estaba en 1.82 dólares.