POR GERMAN MARTE
El movimiento cívico Participación Ciudadana (PC) advirtió ayer que el momento no es el mejor para reformar la Constitución de la República como sugirió el presidente Leonel Fernández y estimó que en todo caso debería convocarse una Constituyente que sea elegida por el voto popular. Javier Cabreja, director de PC, alegó hay otros temas que están copando la agenda nacional y que son fundamentales para la economía y la política.

Añadió que los legisladores actuales ya hicieron una reforma a la Carta Magna en el 2002 «y fue una reforma que se hizo para responder a intereses grupales».

La modificación a la Constitución debe hacerse a través de una Constituyente que garantice la participación de los diversos sectores de la sociedad.

En ese sentido explicó que lo que debe hacerse -una vez dadas las condiciones- es que el Congreso modifique el artículo de la Constitución que dice la manera en que debe ser modificada y establecer la figura del Constituyente.

Y cuando esté establecida la Constituyente popular, subrayó Cabreja, esta debe dedicarse a hacer una reforma profunda que vaya más allá de las modificaciones puntuales y coyunturales como ha ocurrido en las últimas veces.

El presidente Fernández propuso el jueves ante la Cámara de Comercio que se inicie un debate público sobre la reforma a la Constitución «que no se limite al vulgar tema de la reelección presidencial».

El presidente favoreció que el Congreso se aboque a revisar la Constitución para corregir «ambigüedades» y establecer delimitar el papel de cada uno de los poderes del Estado.

Propuso para cualquier reforma a la Carta Magna se tome como base un documento que ya fue consensuado por una comisión especial que se integró en el 2001 y que hizo una propuesta acabada que recoge todo lo que se ha debatido sobre la Constitución en las últimas décadas y donde están planteadas los aspectos esenciales que deben ser reformados.