La bahía de Samaná y sus tierras aledañas tienen muchos encantos, sobre todo las de la provincia que lleva su nombre que en estos momentos están en pleno desarrollo turístico con construcciones hoteleras, marinas, aeropuertos, carreteras, restaurantes, en fin todo lo necesario para el disfrute del turismo tanto internacional como nacional y algo muy importante, fuente de empleo y de trabajo para los dominicanos y dominicanas, sobretodo de los samanenses.
Una de las atracciones que ofrece la zona, es observar a las ballenas jorobadas que en cierta época del año, vienen a aparearse en esas aguas y por ende nadan por la bahía a su libre albedrío.
Como consecuencia del desarrollo turístico y el conocimiento de la presencia de estas ballenas en Samaná, se ha formado una especie de sindicato de dueños de botes y lanchas para ir a ver las ballenas.
Este tipo de actividad lucrativa y de servicio a las personas para ver tan impresionante espectáculo es lógico e importante que se desarrolle; sin embargo quiero llamar la atención de las autoridades que tienen que ver con las regulaciones y protección del medio ambiente de las desviaciones que están sucediendo con relación a esto. Las ballenas jorobadas, entran y salen de la bahía en libertad de nadar por donde ellas desean o necesiten; sin embargo, el sindicato de lancheros las acecha y las espantan prohibiéndoles que entren en la bahía, porque muchas personas las pueden observar desde tierra y no utilizan sus servicios para ir a verlas en mar afuera de la bahía. Si se mantienen estas maniobras de espantar a las ballenas y no dejarlas en paz para que naden a su libre albedrío, podría suceder que cambien de rumbo y no volvamos a verlas jamás por nuestro territorio como sucedió con las palomas que cruzaban por Las Palmillas que los cazadores abusaron tanto de ellas sin control de las autoridades, que hoy día no se ve ni una sola, ni por asomo.
Por otro lado, si alguna embarcación de recreo aún en aguas alejadas de la costa pero en territorio nacional trata de observarlas, los marineros del sindicato de lancheros utilizan el canal 16 de comunicaciones marítimas para decir cuantos improperios existen y amenazar a la embarcación en cuestión de que está prohibido estar en ese lugar y les navegan muy de cerca con maniobras que pueden provocar coalición por el simple hecho de no utilizar los servicios del sindicato.
Debo decir que el canal 16 es el canal oficial para informar a las autoridades de la Marina de Guerra sobre la entrada y salida de puertos o avisar de cualquier contratiempo que pueda presentarse en una embarcación en alta mar.
Es por eso que para conversar de cualquier otro tema no oficial debe utilizarse cualquier otro canal.
El llamado a las autoridades lo estamos haciendo con este escrito y considero que las autoridades tanto de la Secretaría de Medio Ambiente, que dirige el amigo Jaime David Fernández, la Secretaria de Estado de Turismo, Marina de Guerra, Sindicatura de Samaná y todas las demás instituciones involucradas, así como personalidades que hacen opinión pública para el desarrollo turístico de la provincia de Samaná, que establezcan reglamentaciones claras que protejan la vida marina y los derechos de los ciudadanos, para el armónico y equilibrado desarrollo del área, sin detrimento de nadie.