Washington. EFE. “No juegues conmigo, tengo ébola” son las palabras que pronunció un pasajero de un autobús de Los Ángeles (EEUU) que provocaron el desalojo del vehículo y la puesta en cuarentena de su conductor, según informaron ayer medios locales.

La policía federal (FBI) está tratando de identificar al sujeto que se subió el lunes a un autobús de la línea 33 con la cara cubierta con una careta y, tras proclamar que tenía ébola, tiró su máscara al suelo y salió corriendo del vehículo, informó el diario Los Angeles Times. Al individuo se le considera como “una posible amenaza terrorista” por el miedo que desató entre los pasajeros, según el portavoz del sistema de transporte, Marc Littman.

Para determinar la identidad del pasajero enmascarado, los agentes están trabajando con las autoridades de tránsito del condado de Los Ángeles para revisar imágenes que grabaron las cámaras de vigilancia.