Hoy 
Naciones Unidas han definido la juventud como la edad entre los 15 y 25 años. Sin embargo, una definición puramente cronológica resulta insuficiente. La juventud es un proceso relacionado con el período de educación en la vida de las personas y su ingreso al mundo del trabajo.
Otros criterios la entienden como etapa vital de construcción de la identidad. Según los mismos son dos períodos de siete años cada uno; el primero comienza, realmente, a los 21 años hasta los 28; mientras el segundo se inicia a los 28 y termina aproximadamente a los 35 años, comenzando la adultez. Reportes del Banco Mundial, reflejan que los jóvenes de los países en desarrollo conforman el segmento de mayor crecimiento de la población mundial, pues más de la mitad de los 5,000 millones de personas que viven en estos países son menores de 25 años.
Es por esta razón, que los jóvenes no sólo son el futuro, sino también el presente; ya que los niños y jóvenes constituyen prácticamente el 50% de la población de los países en desarrollo. No obstante, los jóvenes tienden a ser el grupo más vulnerable de la sociedad, puesto que cuando la comunidad global analiza estrategias e implementa proyectos diseñados para mejorar los estándares de vida, las voces de los jóvenes son las menos escuchadas.
La juventud es el período de cambios comprendido entre la pubertad y la edad adulta. El joven o adolescente está sexualmente desarrollado, pero carece de la necesaria experiencia y la madurez emocional para tratar con equidad todos los problemas que caracterizan a la vida adulta. En consecuencia, como la Juventud tiene el genio vivo y el juicio débil, muchos jóvenes encuentran dificultades y caen fácilmente en actitudes depresivas por razón de diversas situaciones inherentes a estos tiempos. Los basamentos de la juventud se encuentran en el hogar, la escuela y la calle; de hecho, la juventud, en nuestra sociedad, ha empezado a adquirir un rol protagónico en muchos espacios, y básicamente en el campo social. La juventud levantada sobre la base de la educación fundamental resulta de hecho edificante y esencialmente dignificante. Levantarla sobre cimientos falsos es, por consecuencia lógica, un camino equivocado. El Día Mundial de la Juventud se celebra el 12 de agosto; para motivar la conciencia ciudadana en apoyo a la juventud. En República Dominicana se celebra los 31 de enero, desde el año 1993, mediante la ley 20-29, en ocasión del Día de San Juan Bosco, sacerdote que dedicó sus mejores energías a la juventud pobre y abandonada. En honor a ellos ¡Feliz Día Nacional de la Juventud!
