Corea del Norte propuso ayer una investigación junto con Estados Unidos del ciberataque contra Sony Pictures Entertainment, advirtiendo al mismo tiempo que habrá consecuencias “graves” si Washington rechaza una indagación que, según Pyongyang, demostrará que el gobierno norcoreano no tuvo nada que ver con el asunto.

La propuesta aparece como una maniobra típica de los norcoreanos para demostrar su sinceridad, aunque saben que Estados Unidos jamás aceptará su oferta de una investigación conjunta, dijo un analista surcoreano.

Washington culpa a Corea del Norte por el ataque, señalando que las herramientas son similares a otras utilizadas en ataques similares previos que se han atribuido a Pyongyang y ha jurado tomar represalias.
El hackeo provocó la difusión de decenas de miles de mensajes y archivos confidenciales de Sony.

Además, ante las amenazas de ataques terroristas a cines, Sony canceló el estreno previsto para el 25 de diciembre del filme “The Interview”, una comedia sobre una conjura para asesinar al líder norcoreano Kim Jong Un.

Un vocero no identificado de la cancillería en Pyongyang dijo ayer que Corea del Norte sabe cómo demostrar que no es responsable del ciberataque. Agregó que Washington difunde rumores infundados y calumniosos.
Añadió que Estados Unidos carece de pruebas.