Hoy 
El control del Estado sobre el quehacer diario es dominante y amplio
Freedom House
WASHINGTON (AP).- Corea del Norte y Libia son los países más crueles del mundo con sus habitantes, y Cuba está entre los 17 peores, señala una encuesta mundial realizada por Freedom House, un grupo de derechos humanos estadounidense.
En la encuesta de regímenes represivos se destacan 17 países, entre ellos Cuba, pero Corea del Norte y Libia son los que salen más señalados.
La mayoría de los países mencionados reinciden en la lista, mientras que otros 45 son considerados de no tener libertad completa.
Los ocho peores países, según la encuesta, en relación a derechos políticos y libertades civiles son: Burma, Cuba, Libia, Corea del Norte, Somalia, Sudán, Turkmenistán y Uzbekistán. De igual forma consideraron de comportamiento represivo a los territorios de Chechenia y Tíbet. En estos países y territorios, «el control del estado sobre el quehacer diario es dominante y amplio, dijo el informe de Freedom House, con base en Nueva York.
Los otros nueve países de la lista son: Bielorrusia, China, Costa de Marfil debuta en la lista, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Laos, Arabia Saudí, Siria y Zimbabue.
Violaciones masivas de los derechos humanos fueron detectadas en casi un tercio del mundo.
Libia, aseguró Freedom House, ha liberado a algunos prisioneros políticos, pero sigue siendo un país donde sus ciudadanos tienen pocos derechos civiles o libertades políticas.
Corea del Norte controla cada aspecto de la vida social, económica y política de sus ciudadanos, dijo el informe. Miles de prisioneros políticos están detenidos bajo brutales condiciones, agregó.
Arabia Saudí recibió aplausos por otro año de nuevas «reformas, como el establecimiento de una corte suprema en Riad, así como cortes de seguridad, familia, tráfico y comerciales. Pero la libertad religiosa no existe y el gobierno controla férreamente los medios locales, dijo el informe. La libertad académica está restringida e informantes supervisan las clases.
Y Siria, señala el informe, continuó el año pasado con su represión política y de los derechos civiles, al incrementar su lucha contra los disidentes. En tanto, hubo pequeñas mejoras en zonas como el turismo, empleo y residencias, concluyó el estudio.
