Los nuevos miembros de la Cámara de Cuentas, elegidos el   martes por el Senado, y que tienen como presidenta a Licelott Marte de Barrios, tendrán múltiples retos, entre ellos levantar la imagen del organismo que quedó maltrecha luego del escándalo que provocaron sus ex miembros, así como mantener una extrema supervisión  del  uso que dan las instituciones del Estado a los fondos públicos. 

Otro de sus desafíos será dar seguimiento a más de 80 auditorías que tenían en carpeta los ex jueces del organismo y las que realizaron a unas pocas entidades del Estado, de las que no se han probado actos dolosos, pese a que la mayoría de las encuestas nacionales e internacionales resaltan la incesante ola de corrupción en la administración pública.

Los demás miembros que acompañarán a Marte de Barrios son Pablo del Rosario, vicepresidente, e Iván Rondón, secretario. Además, José Heredia, José Nicolás Almánzar, Jorge Surcar, Pedro Antonio Ortiz Hernández, José Attías y Juan Luis Selimán,  juramentados ayer por el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez.

Pocas auditorías.  Un informe de la Dirección Nacional de Persecución de la Corrupción Administrativa (DPCA) destaca que en esa dependencia sólo recibieron de la CC siete auditorías practicadas a varias juntas municipales de Montecristi y Ocoa, y la del departamento de Pensiones y Jubilaciones de la anterior secretaría de Finanzas, así como a la Refinería Dominicana de Petróleo, las que aún están en fase de investigación, según la DPCA.

Marte de Barrios, ex dirigente del PRSC, será la segunda mujer en dirigir la CC, ya que en los 153 años de creada la doctora Elsa Rodríguez la presidió en 1993-94 y 1997-98.

La clave

Completarán período

Los nuevos jueces completarán el período constitucional de cuatro años iniciado por los anteriores, quienes tras ser escogidos por el Senado el 19 de diciembre de 2006,  un año y siete meses después   se vieron envueltos en un escándalo interno,  por lo que  fueron sometidos a un juicio político por la Cámara Alta.