La vicepresidente Raquel Peña en su discurso ante el Comité Ejecutivo ampliado de la Liga Municipal Dominicana, narró un singular episodio familiar. La segunda mandataria relató que varios años atrás, su padre, el emblemático empresario santiaguero, Leocadio Peña, al despedir desde su hogar, a Daniel Rivera y Víctor D’Aza, apuntó “mi hija, ahí van dos jóvenes promesas de la democracia”.

Hoy, Daniel Rivera y Víctor D’Aza están al frente de estructuras vitales del Estado. Rivera Reyes conduce el ministerio y gabinete de salud. Tiene mérito de facilitar apoyado por la presidencia, la estrategia mundialmente reconocida, contra la pandemia Covid-19.

Víctor D’Aza Tineo por virtud propia y apoyo presidencial, dirige asertivamente, la Liga Municipal Dominicana (LMD). Órgano fundado hace 85 años (1938), pero que en las últimas décadas fue entregado a políticos como premio de consolación.

Hoy, corresponde examinar la Liga Municipal, entidad que antes de la ley de municipios 176-07, había sido conducida por 25 secretarios generales, y posteriormente por cuatro, Amable Aristy Castro, Fidias Aristy, Jhonny Jones y Víctor D’Aza. Sin embargo, desde Wenceslao Troncoso (1938) hasta hoy, ninguno de los 28 secretarios generales de la LMD anteriores, se habían enfocado como el actual.

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Su labor se dirige a la descentralización y empoderamiento de los ayuntamientos. El pasado rol centralizador de la LMD generó que en el año 2000, 27 alcaldes de diferentes partidos, fundaran FEDOMU. Una asociación de municipios no discriminatoria, apartidista, de interés público y social.

La nueva Liga Municipal Dominicana resultará de cuatro trasformaciones sustantivas. Primera, el cambio ejecutivo auspiciado por presidencia de la República, vía el Programa de Apoyo a Gobiernos Locales con fondo de 4 mil millones de pesos anuales para pequeñas obras locales. La segunda, la creación del Gabinete de Descentralización y Desarrollo del Sistema de Transferencias de Competencias y Financiamientos a municipios (Decreto presidencial 734-22).

La tercera es la apertura de la primera delegación de LMD para el Cibao, en Santiago. La cuarta es la presentación de tres iniciativas de ley: i) Ley Orgánica de Administración Local, ii) Ley de exoneraciones para vehículos de servicios municipales (ambulancias, camiones de bomberos, y camiones compactadores de residuos y otros equipos); y iii) la Ley del Instituto de Previsión Social Municipal.

Los 48 mil kilómetros cuadrados de República Dominicana pueden ordenarse mejor, si la LMD, apoya como lo hará, las Alcaldías de los Ayuntamientos más grandes del país como Santiago, Santo Domingo, San Francisco de Macorís y La Vega; en la implantación de normas de ordenamiento territorial, fortalecidas tecnológicamente vía robustecer oficinas y donar laboratorios cartográficos de planeamiento urbano.