Hace varios meses que había trascendido en círculos gubernamentales que esta segunda línea del Metro sería asignada a un grupo nacional que financiaría una parte y buscaría otra en bancos extranjeros

El director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte, ingeniero Diandino Peña, informó ayer que la primera etapa de la segunda línea del Metro de Santo Domingo solo se extenderá desde la avenida Máximo Gómez hasta Los Alcarrizos. Esta obra tendrá un costo similar a la primera línea, de unos US$750 millones.

El director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte, Diandino Peña, informó ayer que la primera etapa de la segunda línea del Metro de Santo Domingo solo se extenderá desde la avenida Máximo Gómez hasta Los Alcarrizos y tendrá un costo similar a la primera línea, de unos US$750 millones.

Peña dijo que está en el final de la licitación, que implica la evaluación de las propuestas y que aproximadamente dentro de un mes estará en condiciones de decir si es adjudicable la concesión a dos empresas interesadas, una nacional y otra internacional.

Explicó que se hacen labores preliminares para prepararle las condiciones al eventual concesionario, porque el Gobierno tiene que hacer unos preparativos en término de aportes para ganar tiempo.

Dijo que esos trabajo se hacen con recursos propios de la Opret, consignados en el presupuesto de la entidad del pasado año.

El director de la Opret dijo que lo que se hace en la avenida José Ortega y Gasset es abrir el portal del túnel para que el sector privado continúe con sus equipos y puedan trabajar sin inconvenientes.

Poco dinero y menos tiempo. Al preguntársele por qué el primer tramo de la segunda línea del Metro no se hace desde la avenida Máximo Gómez hacia el municipio Santo Domingo Este, dijo que la crisis económica y el tiempo que le queda al Gobierno hace casi improbable que se pueda completar la segunda línea completa que es de 30 kilómetros desde Los Alcarrizos hasta San Luis.

Aclaró que el desalojo que se hizo en Los Guandules es para aprovechar los materiales que sean extraídos de la línea dos para terminar la avenida que bordeará los ríos Isabela y Ozama, que conectará con la cabecera del puente Jacinto J. Peynado, de Villa Mella.

El ingeniero Diandino Peña indicó que el desalojo para hacer la avenida se hará después y eso implicará la construcción de apartamentos para reubicar a las familias afectadas por la obra. Todavía hay afectados de la primera línea.

Familias alerta

Más de 200 camiones de caliche han sido vaciados a orillas del río Ozama, en el barrio Gualey, casi debajo del puente Francisco del Rosario Sánchez (de la 17) en la reanudación de la construcción de la avenida Perimetral, que se inicia en La Zurza y que empalmará con la avenida Presidente Caamaño. Avanzan los trabajos para la segunda línea, en el kilómetro 9 de la Autopista Duarte, mientras se hacen pruebas de suelo en las avenidas Kennedy, padre Castellanos, San Vicente de Paúl y Carretera Mella, por donde pasaría el Mero. Mientras las máquinas se imponen en la margen del Ozama, los moradores de la zona temen que la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) inicie nuevos desalojos, ya que por donde se encamina la obra hay cientos de viviendas.

Patricia Gómez, coordinadora del Comité para la Defensa de los Derechos Barriales (Copadeba), informó que el subdirector de la Opret, Leonel Carrasco, se comprometió a retomar el diálogo con las organizaciones sociales la próxima semana. Señaló que mientras se rellena parte de la margen del río Ozama en la parte de arriba se trabaja en la medición del puente y se cambian postes del tendido eléctrico, labores que según afirmó Carrasco desconoce.

Los graves daños

Se ha denunciado que en los alrededores donde fueron tumbadas 23 viviendas en diciembre, se ha programado desalojar por lo menos 70 casas, que tiemblan con el paso de los equipos pesados.