Las cabras Charlie, Cowgirl, Mallomar y Chico son las encargadas este verano de comerse las malas hierbas que crecen en las rocas de la sección de Forever Wild, una área natural protegida y santuario de aves de Riverside Park, parque que bordea en río Hudson en el Upper West Side de Manhattan.

La presentación de estos herbívoros desbrozadores tuvo lugar este viernes en el festival Goatham, que se celebró en el mismo parque con música y varias casetas relacionadas con el medio ambiente.

Los asistentes trataron a los rumiantes como si se trataran de los componentes de una banda de rock, al sacarse selfis con las cabras e intentar acercarse lo máximo posible a estos animales.

Marcus Cáceres, uno de los organizadores del evento que trabaja para la conservación de este parque, dijo a Efe que el objetivo es que en los próximos dos meses y medio estas cabras se coman las especies invasoras que crecen en esa zona.

“Es realmente difícil para nosotros trabajar en ese espacio porque es muy traicionero, hay muchos árboles caídos, hiedra venenosa y muchos obstáculos que hacen mucho más difícil que nuestro personal trabaje allí (…) Pensamos en una forma innovadora de obtener una ayuda adicional haciendo que las cabras vinieran a ayudarnos”, anotó.

Cáceres señaló que esta, además, es una manera muy ecológica de podar la zona, ya que evita el uso de pesticidas, y que por lo general este tipo de animales son muy amigables.

“Las cabras son muy sociables. Es hasta difícil para nosotros convencerlas para que coman porque prefieren interactuar con la gente que pasa”, anota.

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En lo referente al clamor que hay por este tipo de animales en la Gran Manzana, Cáceres anotó que estas cabras cuentan con un “club de fans».

«(La cabra) Mallomar ha estado con nosotros durante unas tres temporadas. Y hace un trabajo fantástico. Pero en general todas (las cabras) son muy amables y dulces. Y cada una de ellas tiene su propia personalidad”, anotó.

Nina Chatel y Julia Goldstein, dos vecinas del barrio que se acercaron hoy a la feria para conocer a las nuevas cabras, dijeron a Efe que lo que más les gusta de estos animales son “lo adorable y agradables que son».

Cáceres explicó que las cabras encargadas de limpiar esta parte de Nueva York forman parte de Green Goat, una organización que da una segunda vida a cabras y ovejas que han sido abandonadas o se han “jubilado».

Así mismo, anotó que se usa a este tipo de animales para comer todo tipo de plantas invasoras en diversos parques de la ciudad de Nueva York, como Prospect Park, en Brooklyn, y Governors Island, en esta isla al sur de Manhattan.