El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció este domingo que reforzará la presencia de las fuerzas policiales alrededor de iglesias y templos de la región tras los atentados perpetrados en Sri Lanka, en el que han fallecido al menos 207 personas y 450 han resultado heridas.
“Después de estos despreciables actos de violencia y como medida de precaución, he pedido a la policía estatal que incremente las patrullas alrededor de las iglesias y templos hoy por todo el estado”, afirmó Cuomo en un comunicado remitido a la prensa.
El gobernador quiso expresar el pésame de todos los neoyorquinos al pueblo de Sri Lanka y a los familiares de los fallecidos, y aseguró que “los actos cobardes de violencia” no intimidarán a los ciudadanos del estado.
“Nuestros pensamientos están con la gente de Sri Lanka. Los mortales ataques sobre iglesias en el Domingo de Pascua son a la vez horribles y desgarradores. Rezamos por ustedes”, agregó Cuomo.
Una serie de atentados ocurridos hoy en Sri Lanka contra cuatro hoteles y tres iglesias han dejado hasta ahora 207 muertos, mientras que otras 450 personas han resultado heridas.
Las primeras seis explosiones se produjeron de forma simultánea hacia las 8.45 horas (2.30 GMT) en al menos tres hoteles de lujo en Colombo y también en una iglesia de la capital, otra en Katana, en el oeste del país, y la tercera en la oriental Batticaloa.
Horas después, una séptima detonación tuvo lugar en un pequeño hotel situado a unos cien metros del zoo de Dehiwala, a una decena de kilómetros al sur de la capital, y la última en un complejo residencial en Dematagoda, también en Colombo.
En un país poco habituado a la violencia contra los cristianos, aunque sí a los enfrentamientos entre budistas y musulmanes, estos ataques coinciden con la celebración del Domingo de Resurrección, una de las mayores festividades de la Semana Santa.