Nuevas protestas colocan a Bolivia al borde de una crisis social

Nuevas protestas colocan a Bolivia al borde de una crisis social

La Paz.- Bolivia vivirá hoy una nueva jornada de protestas y bloqueos de carreteras como consecuencia de la falta de consenso entre el Gobierno y los sindicatos sobre la controvertida Ley de Hidrocarburos, que amenaza con una fractura social.

El fracaso del diálogo el jueves entre el presidente Carlos Mesa y los líderes sindicalistas y de la izquierda boliviana apunta a un agravamiento de la crisis que vive este país andino desde hace semanas, y que llevó al mandatario a anunciar su dimisión el pasado 6 de marzo.

Aunque el Congreso le ratificó en el cargo dos días después, al rechazar por unanimidad su dimisión gracias a un acuerdo de Mesa con la mayoría de las fuerzas políticas representadas en el Parlamento, no ha sido posible el consenso por la negativa de los izquierdistas a acatar el texto del proyecto de ley energética que propone el Gobierno.

Tampoco han tenido efecto las masivas manifestaciones que ayer protagonizaron los partidarios del presidente Mesa en las principales ciudades para exigir el fin de los bloqueos viarios, que impiden el tránsito de mercancías y personas, con las consiguientes pérdidas económicas.

Un informe del Ministerio de Desarrollo Económico de Bolivia detalla que los bloqueos registrados en las rutas viarias del país desde principios de año hicieron caer las exportaciones en enero en un diez por ciento hasta situarse en 148 millones de dólares.

Además, la agencia calificadora estadounidense Standard and Poors ha advertido de que la nueva política adoptada por el presidente Mesa desde que presentó su dimisión el domingo pasado es más agresiva e implica un mayor riesgo para el país.

De acuerdo con la agencia de calificación de riesgos, los grupos que se oponen a la reforma energética de Mesa «están unificando y radicalizando sus posiciones», y esto podría tener consecuencias negativas para el país.

El diputado, dirigente del Movimiento Al Socialismo (MAS) y líder cocalero, Evo Morales, junto a las organizaciones afiliadas a la histórica Central Obrera Boliviana (COB), anunciaron el endurecimiento de sus acciones de protesta a partir de hoy por su desacuerdo con la política energética de Mesa.

Estos grupos opositores no están dispuestos a aprobar una ley de hidrocarburos que contemple regalías inferiores al 50 por ciento, cuando el Ejecutivo considera imposible elevar hasta ese porcentaje las tasas.

La regalía es un pago fijo por explotar recursos naturales, que asciende actualmente al 18 por ciento para los contratos entre el Estado y las multinacionales, y que se cobra aparte de los impuestos generales.

A las protestas que se suceden en Bolivia contra la controvertida Ley de Hidrocarburos, cuyo debate en el Congreso se suspendió el jueves por la falta de consenso entre la Presidencia y los sindicatos, se unen otros conflictos sociales que mantienen ahogada a esta nación, la más pobre de Sudamérica.

Desde hace semanas, los habitantes de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, exigen en las calles la interrupción de los contratos con la compañía Aguas de Illimani, filial de la francesa Suez, por los altos precios de este bien primario.

Además, los transportistas de Santa Cruz de la Sierra vivirán hoy su tercera jornada de huelga para exigir un incremento de tarifas que compense la reciente subida de los precios del carburante.

En esta ciudad del oriente boliviano, 44 huelguistas fueron detenidos y al menos un reportero de televisión y cinco policías resultaron heridos leves el jueves, además de un número indeterminado de transportistas.

 

 

 

 

 

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas