Indonesia — Soldados, policías y residentes de una aldea Indonesia buscaban el martes entre el lodo a posibles víctimas de un deslave causado por las lluvias torrenciales que mató a al menos nueve personas y dejó otras 34 desaparecidas.
Las toneladas de barro que cayeron desde las colinas cercanas en la noche del lunes sepultaron 30 casas en la localidad de Sirnaresmi, en el distrito de Sukabumi, en Java Occidental. Sesenta personas desplazadas huyeron a un refugio temporal, explicó Sutopo Purwo Nugroho, vocero de la Agencia de Mitigación de Desastres.
Más de 500 rescatistas recuperaron ocho cuerpos de entre los montones de lodo y rescataron a cuatro heridos, incluyendo un bebé que falleció en el hospital, agregó el portavoz. Los equipos siguen buscando a 34 aldeanos desaparecidos.
Las autoridades tuvieron problemas para llevar tractores y maquinaria pesada a través de las arrasadas carreteras mientras las fuertes lluvias obstaculizaban las tareas de búsqueda, señaló Nugroho. Imágenes emitidas por televisión mostraron a cientos de policías, soldados y residentes cavando entre los escombros con sus manos, palas y azadas.
“La falta de equipos, el mal tiempo y un apagón obstaculizaron nuestros esfuerzos para rescatar a aquellos que siguen desaparecidos y que tememos que hayan muerto”, dijo Nugroho.
Las lluvias estacionales y las mareas altas registradas en los últimos días causaron docenas de deslaves e inundaciones generalizadas en buena parte de Indonesia, una cadena de 17.000 islas donde millones de personas viven en zonas montañosas o cerca de llanuras fértiles junto a ríos.
El deslave se produjo durante las celebraciones de Año Nuevo y a menos de dos semanas de la trágica erupción de un volcán y un tsunami que dejaron más de 437 fallecidos en las islas de Java y Sumatra.