Ayer tomaron fuerza los temores de que la inflación actual no ceda por ahora, al rendimiento del bono estadounidense a 10 años tocar el 2%, tras conocerse que la inflación escaló en enero hasta el 7,5% interanual. La reacción del mercado se explica por el hecho de que la inflación juega en contra de los tenedores de bonos al limar el interés que se recibe.
Que la inflación aumente significa que los pagos de intereses futuros que uno percibe por mantener el bono valen menos. Esto también hace menos atractivo al bono a la hora de desprenderse de él.
Los bonos se han convertido en la primera víctima del pánico que han generado las presiones inflacionarias y con el aumento del rendimiento de los bonos públicos los inversores en deuda se lo están haciendo notar a los gobiernos y bancos centrales.
Para entender el aumento del rendimiento de los bonos hay que comprender el funcionamiento del mercado. Si los inversores acuden a los bonos (lo cual suele ocurrir más cuando las expectativas de inflación son bajas), su precio subirá y bajarán los rendimientos.
Prechequeo para los vuelos desde RD a EU impulsará el turismo
Si los inversores empiezan a salirse, los precios bajarán con el consiguiente aumento de los rendimientos, que es lo que está ocurriendo en la actualidad.
Si siguen aumentando los rendimientos del bono a 10 años del Tesoro estadounidense perjudicaría los valores de Wall Street. Según los cálculos de Ned Davis Research, el Nasdaq podría caer hasta un 20% si los rendimientos continúan en ascenso y el bono se sitúa en un 2% a finales de año, algo que desde la consultora dan por seguro.
Beneficios Coca-Cola 2021: US$9.771 MM
La multinacional de bebidas Coca-Cola obtuvo un beneficio de 9.771 millones de dólares en 2021, un 26% más respecto al año anterior.
En el cuarto trimestre, el fabricante de refrescos estadounidense tuvo unas ganancias de 2.414 millones.
Reforma eléctrica no debe ser obstáculo
John Kerry, enviado especial del Gobierno de EU para asuntos climáticos, abogó porque la reforma eléctrica en México no sea un obstáculo para mantener la economía abierta y competitiva.
Pide que estimule la inversión privada, no asustarla.