Qué rico es hacer turismo interno. Lo confirman experiencias recientes, conectadas con mi gran pasión por la música. Una fue el congreso del Bolero, como quedó en la memoria colectiva que nos llevó al Centro León y al hotel Gran Almirante en Santiago. El disfrute de uno se reafirmó con la confortabilidad y belleza del otro. Excelente ambiente y calidad de servicio. El otro fue el Latin Music Tours, disfrutado al máximo, en la novedosa propuesta de suites de lujo del Bávaro Palace, del Complejo Barceló.

Recuerdo a Olga Guillot, a Carlos Monsiváis y a Omara Portuondo. A Johnny Ventura, a Huchi Lora, Los Rosario y Milly, pero no olvido lo bien que dormí y comí en esos días inolvidables de buen hotel y parrandas musicales. Mi tercer gran recuerdo es el concierto de Andrea Bocelli, un lujo para los oídos que vistió de gala hasta las piedras de Altos de Chavón en La  Romana.