Este diario insertó en la página 14B del cinco de este mes, una foto tétrica, horrible, que los dominicanos todos a uno debemos y tenemos que impedir su repetición, que muestra al ciudadano haitiano Jean Claude Harris colgado de un árbol en el parque Ercilia Pepín de Santiago de los Caballeros.

¡Nunca más!, semejante barbarie debemos permitir su repetición en el país para evitar que nos equiparen con los grandes criminales haitianos como Faustino Souluque y Henri Cristóbal, que arrasaron poblaciones del Este de la isla Hispaniola, aunque aún no teníamos credencial de dominicanos, pero sí de seres humanos.

¡Nunca mäs!, ese hecho criminal despreciable debemos permitir que se repita contra seres humanos de cualquier nacionalidad, en este caso, míseros nacionales haitianos que abandonan su país porque no consiguen el mínimo sustento para sobrevivir, como dominicanos que emigran por lo mismo.

¡Nunca más!, un acto tan abominable debemos permitir ocurra de nuevo y concentrar nuestros esfuerzos en no solo respaldar la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional que organiza de manera específica la política migratoria del Estado dominicano.

¡Nunca mas!, semejante acción bárbara y deleznable debemos tolerar se repita y sí constituirnos en una sola persona para cumplir el inicio pacífico y ordenado de la expatriación de ilegales residentes en nuestro territorio, pautada para el 16 de junio próximo.

¡Nunca más!, una acción tan vituperable y bochornosa en contra de un ser humano indefenso, sin haber sido juzgado en un tribunal competente, como el vil asesinato de Jean Claude Harris, sino tratar civilizadamente y conforme a las leyes la cuestión de repatriar indocumentados residente en nuestro país y determinar cuántos son necesarios y en cuáles áreas de trabajo.

¡Nunca más otro Jean Calude Harris!. ¡Nunca más! ¡Nunca jamás!