Obama reitera cierre del reclusorio de Guantánamo

Obama reitera cierre del reclusorio de Guantánamo

Washinton, (AP).- El presidente Barack Obama reafirmó enérgicamente hoy su decisión de cerrar la cárcel militar de Guantánamo, que calificó de «embrollo», y dijo que no hará nada que ponga en peligro al pueblo estadounidense.

Por su parte, el ex vicepresidente Dick Cheney defendió la política de seguridad nacional del gobierno de George W. Bush, diciendo que se basaba en la decisión de no olvidar el terrible daño causado por los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.

Obama sostuvo que la existencia misma de la prisión en la base estadounidense en Cuba comprometía la seguridad nacional y le servía a al-Qaida como argumento para reclutar efectivos.

Argumentó en un discurso el jueves que unos 500 detenidos ya habían sido liberados por el gobierno del presidente George W. Bush y que mantener la prisión de Guantánamo «devaluaba esa autoridad moral que es la moneda estadounidense más fuerte en el mundo».

«No nos beneficiará en absoluto el argumento del miedo que aparece cada vez que analizamos el tema», insistió el mandatario.

«No hay soluciones limpias ni fáciles en este caso», dijo Obama en un discurso en el que prometió nuevamente «limpiar el embrollo de Guantánamo».

El presidente habló ante abogados militares en un gran salón de los Archivos Nacionales donde se exhibían la Constitución, la Carta de Derechos y la Declaración de Independencia.

«Puedo decirles que la respuesta equivocada es pretender que este problema desaparecerá si mantenemos si mantenemos un status quo insostenible», insistió Obama. «Como presidente, me niego a que este problema siga creciendo. Nuestros intereses de seguridad no lo permiten. Nuestros tribunales no lo permiten. Y tampoco deberían permitirlo nuestros consciencias».

Obama indicó que su gobierno estudia la situación de cada un de los reclusos que aún permanecen en Guantánamo «para determinar la política apropiada en el trato que debemos dispensarles».

«Nadie ha escapado de una de nuestra prisiones de ‘supermáxima seguridad’, que albergan a centenares de terroristas convictos», dijo Obama.

Obama indicó que los abogados del gobierno aprobaron el traslado de 50 detenidos de Guantánamo a otros países.

Obama analizó el tema un día después que el Senado estadounidense _ a insistencia de la mayoría demócrata _ rechazó un pedido del presidente para destinar 80 millones de dólares al cierre del reclusorio, moción a la que se sumó la oposición republicana.

La incómoda situación se produjo al mismo tiempo que Obama intenta convencer a sus aliados para que acepten en sus países a varios de los detenidos en Guantánamo. Mientras que Francia aceptó la llegada de un recluso, cumpliendo la promesa que hizo a Obama durante la cumbre de la OTAN en abril, otros aliados europeos se negaron en redondo o no se comprometieron con una respuesta específica.

Al mismo tiempo, la negativa fue una victoria para los senadores republicanos, que han centrado su atención en la política exterior de Obama y el terrorismo tras no lograr puntos con sus críticas a su política económica.

En un discurso pronunciado después que Obama concluyó el suyo, Cheney dijo que aunque el gobierno y la política han cambiado, las amenazas a Estados Unidos persisten.

Según señaló el ex vicepresidente en un discurso que pronunció en el American Enterprise Institute, un grupo de estudios conservador, el gobierno de Bush estuvo impulsado por la intención de asegurarse que el 11 de septiembre «no fuese el preludio para algo peor».

También expresó que cuando el presidente Barack Obama adopte pasos que él apoya, como aumentar la cifra de tropas en Afganistán, o cancelar su plan de divulgar fotos de detenidos víctimas de malos tratos, él lo respaldará.

Obama «merece nuestro respaldo» por dos decisiones «sabias»: su manejo de la guerra en Afganistán y la decisión de intentar bloquear la divulgación de fotos de abusos a detenidos, dijo Cheney.

Pero el ex vicepresidente dijo que las acciones del actual gobierno en Guantánamo, así como otros pasos que adoptó en la guerra contra el terrorismo, «no deben basarse en lemas, o en retórica de campaña, sino en una veraz narración de la historia».

Cheney se ha convertido en el más franco ex funcionario de Bush a la hora de criticar al equipo de Obama. Ha señalado que varios pasos adoptados por el nuevo presidente han hecho al país menos seguro.

Al referirse al anuncio de Obama de que pensaba cerrar la prisión militar de Guantánamo, dijo que la decisión se adoptó «con escasa discusión, y si plan alguno».

Señaló luego que «el presidente dice que algunos terroristas deben ser llevados a territorio de Estados Unidos para ser procesados en nuestro sistema tribunalicio. Otros, dice, serán enviados a otros países. Pero hasta ahora, Estados Unidos ha tenido poca suerte para que otros países acepten terroristas empedernidos».

Publicaciones Relacionadas

Más leídas