En una celebración atípica del Día de la Virgen de la Altagracia, donde no hubo tumulto de feligreses para evitar la propagación del covid-19, el obispo de la Diócesis de la Altagracia, monseñor Jesús Castro, hizo un llamado a respaldar la decisión de las nuevas autoridades de luchar contra la corrupción, “contra esa lacra que está destruyendo la sociedad de la República Dominicana y que se convierte en humillación, en afrenta cuando disminuye para numerosos ciudadanos los recursos y se difunden sin parar la pobreza extrema”.
Al encabezar una misa en la Basílica de Higüey, el religioso dijo que históricamente ha habido un mal manejo de los recursos y en vez de buscar el bien común, se aprovechan de los bienes del Estado para fines personales, egoístas y mediocres.
“Eso mismo favorece el crecimiento de la corrupción, del narcotráfico y del mal manejo de los fondos y del patrimonio nuestro”, precisó.
También, externó su preocupación por la explotación del medio ambiente.
“Pídamos a la virgen María para poder enfrentar tantos desafíos”, exclamó.
Asimismo, monseñor Castro hizo un llamado a la unidad para combatir la pandemia, tras señalar que se ha evidenciado una desunión para enfrentar la enfermedad.
“No podemos seguir cada uno por nuestra propia cuenta. De una vez y por todas tenemos que aprender a caminar y a trabajar unidos”, agregó.
Al acto religioso con motivo del Día de la Virgen de la Altagracia, madre protectora y espiritual de los dominicanos, apenas se permitió la presencia de algunas autoridades locales.
En un hecho sin precedentes, en esta ocasión y como consecuencia del covid-19, no se registraron tumultos de personas. Tampoco asistió, como es costumbre, el Presidente de la República, ni su séquito de funcionarios de primer orden
El acto religioso fue transmitido a través de Color Visión, como canal matriz, unido a una cadena de canales de televisión. También por los canales de Youtube de la Basílica (@basilicadehiguey) y del Banco Popular (@Popularenlinea).
Durante su intervención en el acto religioso que inició a las 8:00 de la mañana, Castro dijo que aunque muchos problemas agobian, hay signos de esperanza.
Hizo referencia a la inseguridad, la violencia de género, la criminalidad, la crisis económica, la falta de fuentes de trabajo y los ataques ideológicos contra la vida humana, el matrimonio y la familia.
“Confíemos en la Virgen de la Altagracia y que intercederá por nosotros ante su hijo Jesús. Pongamos en sus oídos y su corazón maternal las diversas necesidades tanto materiales, espirituales, personales, comunitarias, todas las situaciones que a veces envuelven a nuestra Nación”, expresó.
De igual forma, exhortó a fomentar los valores éticos, de honestidad, verdad y justicia, así como el sentido solidario y la coherencia entre lo “que decimos y hacemos”.
Abogó para que el respeto a los demás sea parte de la vida cotidiana del pueblo dominicano.
Previo. Desde la medianoche se realizó el evento “Por amor a la Virgen”, una vigilia desde la Basílica, con oraciones, canciones, testimonios y mensajes de fe.
Inició con una misa a cargo de monseñor Antonio Camilo, obispo emérito de La Vega y continuó con la vigilia, a cargo del padre Evaristo Areché, rector de la Basílica de Higüey.
En distintos momentos, obispos de diferentes provincias del país, se dirigieron a la audiencia virtual con mensajes de esperanza y reflexiones sobre la familia, la fe, la solidaridad y las dificultades de la pandemia.
La soprano Nathalie Peña-Comas interpretó una versión en español del Ave María y luego Niní Cáffaro cantó Por Amor. También, tuvieron actuaciones especiales la Orquesta Sinfónica Nacional, dirigida por el maestro José Antonio Molina, así como los artistas Celinés Díaz, Ester Hernández, Kairy Márquez, Mikey Mendoza, Alfareros y Manny Rosado.